Subnautica fue una verdadera revelación para todos los amantes de los juegos survival, con un lanzamiento sin mucho ruisi en 2014 que sin querer logró llamar la atención de muchas personas. Esto abrió el camino para la llegada del juego completo 4 años después, el cual incluso maravilló a público ajeno al género. Ahora, después de ese gran viaje, por fin llega Below Zero, la segunda parte de la aventura, que nos cuenta una historia diferente al título original, pero que sin duda sabe cómo mantenerse en la mira de los fanáticos.

Un mundo inhóspito

Subnautica: Below Zero es el siguiente paso en este increíble mundo submarino, que empezó como el ambicioso contenido descargable que llegaría a la entrega original. En algún momento, el plan cambió para ser una aventura separada que sigue dejando muy en alto el nombre de Unknown Worlds Entertainment, la desarrolladora detrás del proyecto.

Subnautica: Below Zero nos pone en los zapatos de Robin Ayou, una científica, que al enterarse de la misteriosa desaparición de su hermana y todo su equipo, viaja al acuático planeta 4546B, para embarcarse en una de las misiones más peligrosas en este inhóspito y hostil mundo. En camino al planeta sufrimos un aparatoso accidente que nos deja sin alguna herramienta o suministro para poder sobrevivir y de aquí en adelante, tendremos que ingeniárnosla para poder salir con vida y lograr descifrar los enigmas de este bello mundo.

El juego nos da la opción de escoger la dificultad dependiendo de lo que busquemos, comenzando con un modo estándar -y en el cual se basó esta reseña-, en el cual tendrás los factores y barras de las cuales debes estar al pendiente. También está el modo creativo, que al igual que en otros juegos permite conocer mejor el mundo, experimentar libremente y despreocuparnos por alimentarnos o recursos. Por último, está el modo supervivencia que funciona igual que el modo estándar, con la gran diferencia de que, si morimos, será para siempre. Todo un reto sin duda.

Aliméntate sanamente

Subnautica: Below Zero es un survival con todas sus letras, basado en la exploración y gestión de barras como de alimentación, hidratación, temperatura, oxígeno y vida. Casi todo se centra en la investigación submarina, aunque en esta ocasión el estudio optó por anexar una pequeña parte terrestre a la experiencia que se agradece. No obstante, es claro que el punto fuerte sigue siendo el mundo acuático.

Comenzamos la aventura con una pequeña base, que nos servirá para la creación de herramientas, alimentos y todos los artefactos que nos ayudarán a cada vez ir más lejos en las expediciones. Pero claro, para poder crear todo esto necesitamos recursos, que encontramos repartidos en todo el ancho océano. Las primeras expediciones serán únicamente para la creación de pequeños instrumentos como cuchillos, escáner, banderas de localización, etc, y por medio de una agradable curva de mejoras, pronto podemos hacernos de trajes térmicos, deslizadores y algunos otros artefactos que servirán para llevar a la exploración a los puntos más alejados de la superficie.

Al igual que la primera entrega, en Subnautica: Below Zero se mantiene una curva de aprendizaje sencilla. El único problema que pude encontrar fue descubrir cómo obtener cada materia prima, ya que podemos encontrar en cada esquina algo diferente y localizar lo que buscamos sin tener una idea de donde obtenerlo puede detenernos bastante tiempo.

Un mundo por explorar

Tal como en nuestro mundo, el océano en el planeta 4546B es un área que poco conocemos. Es increíble pensar en los biomas, criaturas y materiales que podemos encontrar de tener los equipos adecuados para poder tener estos viajes. Justo esto me parece que es lo que mejor hace Subnautica: Below Zero y por lo que el juego brillo en su salida. Es increíble comenzar con pequeñas expediciones que se limitan a cuánto tiempo podemos aguantar la respiración, a realizar expediciones cada vez más complejas a las profundidades. Cada viaje se tiene que planear de diferente manera, seleccionar qué nos llevaremos y nos pueda ser útil sin robar mucho espacio y poder regresar con el mayor botín.

Una de las mejores experiencias es encontrar una cueva, entrar y descubrir que es un laberinto de túneles, el cual nos llevara por diferentes biomas llenos de vida y colores neones en su mayoría. Para estas expediciones es probable que nos perdamos, por lo que el título mantiene su misión de entregar una experiencia de supervivencia de la que solo saldremos victoriosos si hacemos lo que el juego nos enseña durante los trayectos.

Departamento de soltero

Subnautica: Below Zero cuenta con una mecánica de construcción muy similar a otros juegos del género; en el que debemos de colocar un holograma del cuarto a construir y este se indicará con diferentes colores si se puede colocar o no. La interesante de este son las variantes que podemos encontrar, comenzando con la manera de conseguir planos para poder construir cuartos especializados, que encontraremos en cualquier parte dentro de cápsulas. Lo que es realmente sobresaliente es que debemos considerar la presión marítima sobre las estructuras para poder construir, dando un tope a las estructuras que pensamos colocar, además de contar con estaciones de energía que debemos de repartir para poder mantener energizado todo nuestro laboratorio.

Tenemos libertad de tomar la decisión de colocar la cantidad de cuartos que queramos y, si lo deseamos, construir un departamento de soltero a nuestras anchas. Únicamente teniendo los recursos podemos decidir en qué gastar y como queremos que se vea nuestro centro de operaciones.

Hora de nadar

Subnautica: Below Zero es un agasajo visual por donde lo veas, y es que tenemos muy pocos títulos que nos entreguen experiencias bajo del agua. Todo lo que nos muestra y entrega este juego en el apartado visual y sonoro es muy hermoso: vistas increíbles al fondo del mar, cuevas y túneles que nos transportan a nuevos mundos llenos aún más de vida y colores, en los que se detallan las tonalidades y las sombras.

Los mundos terrestres también se ven de manera inigualable y nos regalan algunas postales muy llamativas, pero tal vez alguna variedad en las especies terrestres y la flora pudo generar una experiencia casi similar a la marina.

Como últimas palabras quiero destacar el increíble trabajo que realiza Unknown Worlds Entertainment al mantenerse fiel a Subnautica, el cual llamo la atención de todos y lo hizo el gran juego que es. Poder experimentar un mundo acuático en esta nueva experiencia y lograr que una expedición por materiales a se convierta en una de entender mejor el mundo que nos rodea no es tarea fácil. Hacer que un viaje pueda durar toda una sesión de juego y en algunas ocasiones olvidemos que hay una historia de por medio simplemente porque estamos fascinados con lo que vemos es algo que el estudio ha logrado de manera excepcional.

La capacidad de inmersión que tiene Subnautica: Below Zero es tremenda, con diferentes biomas a descubrir, diversidad de flora y fauna, y que incentiva correctamente el avance gradual de la historia y de la exploración. Pienso que es uno de los mejores títulos del género actualmente y lo recomiendo completamente.

Pros:

+ Sensación de supervivencia calibrada

+ Mundo acuático hermoso

+ Narrativa acorde a la experiencia

Contras:

– Mundo terrestre falto de vida

– Guía para recolección de materiales (para novatos)