Una de las series más prolíficas de Bandai Namco es la saga de ritmo Taiko no Tatsujin; aunque esto no es algo que sabríamos abiertamente en Occidente, principalmente por dos razones: su predominancia como título de arcades y su permanencia durante décadas como exclusivo de tierras japonesas. Afortunadamente, esto ha cambiado poco a poco, notablemente con lanzamientos a partir de 2018 en los mercados americano y europeo. Lo que inicialmente era una serie que ciertos fans de hueso colorado querían poder jugar en sus casas se convirtió en una propuesta interesante y divertida en el género de los juegos de ritmo, el cual se ha visto descuidado un poco desde el ascenso y caída de Guitar Hero y Rock Band.
Aunque esta divertida serie de juegos de Bandai Namco llegó a las consolas de Sony y Nintendo en distintas presentaciones, es ahora que al fin es posible tocar los tambores al ritmo de openings de anime, música pop y hasta mezclas de música clásica con rock en Xbox y PC, gracias a Taiko no Tatsujin: The Drum Master, un juego que, a pesar de no retumbar en el salón de la fama de los videojuegos, es un excelente cimiento para el futuro global de la serie.
Dos colores, un tambor
El concepto detrás de estos juegos es sencillo, como la gran mayoría de los juegos de ritmo. En Taiko no Tatsujin, tocamos las diversas canciones del setlist en un tambor taiko, tocando, por así decirlo, en cuatro posiciones distintas: externa izquierda y derecha, representado con símbolos de color azul, e interna izquierda y derecha, representada por el color rojo.
Junto con estos colores, las pistas donde se moverán las notas tendrán iconos chicos y grandes, los cuales denotan si debemos tocar ambos lados de cada color, al estilo de Donkey Konga, así como notas especiales que requerirán que toquemos la mayor cantidad de redobles posibles. Esta combinación de notas lleva a que, sin importar la dificultad en la que juguemos, sintamos que estamos tocando la canción sonando en nuestros altavoces.
Aunque Taiko no Tatsujin inició su vida en arcades con tambores que fungen como controles, en la actualidad es posible disfrutar de estos juegos con periféricos en consolas caseras. Sin embargo, al ser una serie nueva en Xbox y PC, The Drum Master no cuenta con estos controles disponibles de manera oficial o por terceros: para propósitos de esta reseña, jugué con un control de Xbox, y aunque no es el mismo encanto, las opciones de configuración nos permiten emular a un tambor con los botones frontales y gatillos.
Retomando la mención de la dificultad, parece este juego siempre puede ser disfrutado con el control de Xbox como si fuera el periférico de preferencia, pero la verdad es otra: Taiko no Tatsujin: The Drum Master fue creado con el periférico de tambor en mente, y esto se siente en los niveles de dificultad más altos. Las dificultades iniciales son posibles y extremadamente divertidas, y el nivel Difícil es complicado y retador pero posible. La dificultad Extrema, en cambio, demuestra claramente la necesidad del tambor en canciones de nivel elevado, algunas de las cuales son las mejores de la banda sonora actual.
Un festival ecléctico
Cuando hablamos de juegos de ritmo establecidos, más allá del estilo de juego, el punto más importante es el soundtrack disponible: cuando cada juego es lo mismo, normalmente la lista de canciones es la diferencia entre una compra segura y un título más.
Taiko no Tatsujin siempre se ha destacado por sus canciones variadas, tanto en niveles de dificultad como en géneros disponibles. En esta ocasión, The Drum Master trae consigo una lista muy interesante, la cual incluye música de videojuegos como la siempre solicitada canción de Undertale, MEGALOVANIA, así como soundtracks de anime como HOMURA de Demon Slayer, We Are! de One Piece e incluso CHA-LA HEAD CHA-LA de Dragon Ball Z.
Además de estas canciones que seguro levantarán la ceja de más de una persona leyendo esto, The Drum Master incluye popurrís de música clásica, canciones de Vocaloids e incluso covers de canciones Pop, como I Want You Back de The Jackson 5. En lo personal, la lista de canciones me pareció bastante atractiva, pero también siento que puede ser radical para alguien que no sea fan de la música japonesa. Afortunadamente, es posible comprar algunas canciones adicionales en la tienda con las monedas que adquirimos al jugar, además de que Bandai Namco ha aclarado que el título recibirá contenido adicional en la forma de DLC en el futuro próximo.
Dos tambores al mismo ritmo
Uno de los elementos más divertidos de los juegos de ritmo es la posibilidad de competir o jugar al mismo tiempo con tus amigos, y afortunadamente Taiko no Tatsujin: The Drum Master permite que dos personas toquen la misma canción al mismo tiempo. No solo eso, este título también permite que cada quien pueda disfrutar de la canción en distintos niveles de dificultad: de esta forma, es posible que novatos y veteranos puedan disfrutar a la vez sin tener que esperar turnos.
Adicional a esto, esta entrega de la serie incluye un modo competitivo en línea, el cual nos permite demostrar que somos mejores tamborileros que otros desconocidos alrededor del mundo. Con un sistema interesante, el cual aumenta la dificultad de las canciones que tocamos conforme ganamos competencias, este modo multijugador clasificatorio nos puede tener entretenidos durante varias horas y también nos permitirá conocer canciones que de otra forma no tocaríamos.
Estos modos se ven complementados con la posibilidad de adquirir ropa para Katsu, el carismático tambor Taiko que controlamos, la cual podemos mostrar en todos estos modos: aunque es algo menor, estas opciones de personalización, las cuales también incluyen nuevos kits de sonido para nuestros tambores, permiten convertir al juego en una experiencia diferente para cada persona.
La posibilidad del futuro
El único punto negativo que se podría destacar en Taiko no Tatsujin: The Drum Master es que el juego es solamente lo que acabo de describir anteriormente, ya que no incluye otros modos de juego. No obstante, creo que es importante destacar que en ocasiones los juegos de ritmo no necesitan muchas cosas además de una buena biblioteca de canciones que pueda crecer con el tiempo. Afortunadamente, este punto está siendo bien atendido por los desarrolladores del juego y espero que, con el paso del tiempo, podamos disfrutar de una experiencia más completa.
Taiko no Tatsujin: The Drum Master es una bocanada de aire fresco en un espacio con pocos juegos de ritmo como Xbox, y a pesar de tener pocos modos adicionales que sirven como atractivo a nuevos jugadores, la propuesta de generar más contenido a futuro asegura la continuidad de la saga en consolas del ecosistema de Microsoft.
Pros:
+Lista de canciones variada y retadora
+Opciones de personalización para nuestro avatar
+Modos competitivos en línea y local
Contras:
– Géneros de canciones poco variados
– Falta de modos adicionales