En los últimos 15 años, ATLUS ha pasado de ser una desarrolladora establecida pero con una base de fanáticos pequeña, a convertirse en uno de los estudios de JRPG más reconocidos del mundo. Gracias a sus franquicias Shin Megami Tensei y Persona, hoy el mundo sabe que los géneros de novela visual, gestión, RPG y dungeon crawling, no tienen por qué estar peleados. Pues esta compañía finalmente nos ha entregado con Metaphor: ReFantazio su Magnum Opus, la puesta en práctica de décadas de experiencia.

Las injusticias de nuestro mundo y cómo la empatía puede solucionarlas

A pesar de estar fuertemente influenciado por Shin Megami Tensei y Persona, Metaphor: ReFantazio ofrece puntos de vista únicos, sobre todo desde el punto de vista de la narrativa. Esta no es una historia sobre adolescentes que luchan contra los adultos malvados, pero tampoco una disertación sobre la lucha eterna entre los poderes del bien y del mal. Metaphor: ReFantazio se encuentra en medio, pues su narrativa toca temas mucho más serios y maduros que Persona, pero totalmente aterrizados y directos, a diferencia de Shin Megami Tensei, cuya exposición es mucho más abstracta.

Metaphor: ReFantazio cuenta la historia de un mundo fantástico medieval, específicamente sobre el reino de Euchronia. Este reino está fuertemente dividido en castas; realeza, nobleza y plebe; cuyos escalones suelen estar definidos por las tribus a las que pertenecen los habitantes, que son antropomórfos pero no humanos. El mundo es injusto y desigual; los de arriba ven con desdén a los de abajo, mientras que los de abajo solo sufren la opresión y la explotación.

Tras el asesinato del rey de Euchronia y la desaparición del príncipe heredero, un misterioso hechizo abre la puerta para que el sistema político cambie por completo. El protagonista, que forma parte de la tribu más odiada de todas, empieza a formar un grupo de aliados, con una misión secreta que podría terminar convirtiéndolo en el nuevo monarca de este continente.

Metaphor: ReFantazio no es sutil, su mensaje es muy claro. El título es una reflexión evidente sobre el estado actual de nuestro mundo, de las injusticias que se cometen en él y de cómo un poco de tolerancia, empatía y aceptación podrían ayudarnos a mejorar el estado actual de nuestra sociedad. No es ninguna casualidad que los enemigos más poderosos del juego se llamen… humanos.

En general, la trama es cautivadora, y ofrece suficientes misterios, giros de tuerca para mantenerte siempre entretenido. Asimismo, nuevos personajes y objetivos son presentados constantemente, por lo que siempre tienes la mira puesta en el futuro cercano. No obstante, al igual que con otros juegos del repertorio de ATLUS, Metaphor: ReFantazio tiene un inicio muy lento, en lo que establece la ubicación, la trama, los personajes, y las reglas. No es exageración decir que en tus primeras 5 horas pasarás más tiempo leyendo y viendo cinemáticas que jugando, pero la buena noticia es que el ritmo mejora mucho después de eso.

La solución a la problemática de ese reino (y de nuestro mundo), evidentemente está en crear lazos que nos unan como sociedad. Metaphor: ReFantazio es una oda al compañerismo y la aceptación, por lo que no es ninguna sorpresa que todos tus seguidores y amigos sean de todas las razas. Y al igual que en sus mejores obras, ATLUS logró ensamblar un elenco de personajes entrañable, agradable y chistoso, que nos demuestra el gran poder que tienen la amistad y la fuerza de voluntad.

El protagonista es más o menos una tabula rasa para que te proyectes, agradable pero sin mucha personalidad, aunque me da gusto reportar que tiene líneas de voz, que lo hacen un personaje más creíble. Pero después tenemos a Gallica, una pequeña hada algo mandona pero que está dispuesta a ir hasta el fin del mundo contigo. O a Strohl, un noble con poca paciencia pero mucho corazón que hará lo que sea por salvar al desprotegido. O a Hulkenberg, una antigua integrante de la Guardia Real, con una conducta originalmente estoica, pero que poco a poco se empieza a contagiar de la alegría y jovialidad de sus compañeros. Cada nuevo integrante del equipo suma más a una dinámica amistosa-familiar que simplemente te hace sonreir.

Persona 5 Strikers intentó implementar ese sentimiento de viajar con amigos, y aunque lo logró en buena medida, se sintió como una versión rebajada porque el juego no tenía ni la longitud ni todos los sistemas de la saga principal de Persona. Pues Metaphor: ReFantazio es esa visión realizada al máximo: aquí realmente pasas tus largos días con tus amigos, conociéndolos a fondo, explorando el reino, andando por los pueblos, cumpliendo solicitudes o matando monstruos en mazmorras. Todo para regresar a la taverna en la noche y reír con ellos mientras disfrutas una cena caliente y una buena cerveza.

Cómo ganar amigos e influir sobre las personas

Mecánicamente, Metaphor: ReFantazio es muy parecido a Persona. El protagonista debe viajar por todo el reino, tratando de conseguir el favor de otros súbditos, para volverse el candidato más popular y conseguir la corona. No obstante, los viajes se hacen por tierra y el tiempo de juego está basado en un calendario, por lo que los objetivos principales tienen fechas límite.

Así pues, siempre debes tener muy presentes estas fechas para decidir qué hacer con tus días disponibles. ¿Explorar la mazmorra en turno para cumplir el siguiente objetivo? ¿Explorar mazmorras opcionales para conseguir mejor equipo, ganar dinero y subir de nivel? ¿Pasar tiempo con tus seguidores para mejorar tu relación con ellos y obtener ventajas en combate? ¿Mejorar tus virtudes para abrir más opciones de seguidores en el futuro? La decisión es tuya, pero no puedes hacerlo todo, porque tu tiempo es limitado. Esa presión constante, esa libertad de decisión, eran el punto central en Persona y también lo son en Metaphor: ReFantazio.

Ahora bien, aunque Metaphor: ReFantazio use la maqueta de Persona, no quiere decir que sea igual. Por ejemplo, el aspecto social está mucho más refinado. Aquí, hay menos seguidores que la cantidad de enlaces sociales en Persona; además de que solo tienen 8 niveles en lugar de 10. Esto permite que sus hilos narrativos sean mucho más concisos y directos. Y aunque esto es puramente subjetivo, me parece que sus historias son también más interesantes y de más impacto, ya que tratan temas más profundos y de manera más madura. Finalmente, la manera en que suben de nivel es más directa y comprensible: ya no tienes que visitarlos varias veces o llevarles regalos. Cuando ellos quieren hablar contigo, sabes que es porque van a subir de nivel, pues ya cumpliste el requerimiento necesario. En general, todo el sistema es mucho más efectivo que en Persona.

Como pequeño paréntesis, en Metaphor: ReFantazio no hay romance, o al menos no es un sistema principal, como en Persona. Así que esa parte puede ser un punto a favor o en contra, dependiendo de si te gusta o no.

Arquetípico de ti

La gran adición en Metaphor: ReFantazio es su sistema de Arquetipos, que a grandes rasgos funciona como un sistema de clases/trabajos de un RPG tradicional. A medida que vas conociendo seguidores, añadiendo gente a tu grupo y cumpliendo misiones, irás desbloqueando Arquetipos que cada uno de tus personajes puede usar en combate. Cada arquetipo se especializa en una función, por lo que tiene sus propias habilidades primarias y pasivas, fortalezas y debilidades, y al ir subiendo de nivel irá mejorando.

Entre los más de 40 Arquetipos encontramos las clases básicas y esperadas, como el Mago, que ataca con magia; el Guerrero, que ataca con fuerza física; el Ladrón, que roba objetos, vida y mana; el Caballero, que sirve para llamar la atención y los ataques enemigos; y el Sanador, que apoya y cura al resto del equipo. Lo interesante es que muchos de estos Arquetipos tienen versiones mejoradas, más poderosas y en muchas ocasiones que combinan varias facetas; que puedes desbloquear a medida que los llevas a su nivel máximo.

La verdadera magia de Metaphor: ReFantazio está en que cualquier personaje puede equipar cualquier arquetipo, cambiarlo en cualquier momento y hasta heredar habilidades de otros arquetipos previamente aprendidos, siempre y cuando tengas suficiente dinero para pagar. Esto quiere decir que las posibilidades son básicamente infinitas.

Por ejemplo, si hay una mazmorra que tiene enemigos resistentes a los ataques físicos, puedes libremente hacer un equipo de cuatro magos y acabarla en un santiamén. O si hay un jefe que hace mucho daño y necesitas ganarle rápido pero sin quedarte sin que te mate de dos golpes, puedes usar tres arquetipos ofensivos y un cuarto que sea Caballero, para atraer sus ataques, pero que tenga algunas habilidades de Sanador. El cielo es el límite y tu imaginación la arquitecta de las combinaciones más sinérgicas o locas de la historia.

El siguiente turno… será el último

Es importante destacar que el combate en Metaphor: ReFantazio no está basado en Persona y su 1-More, sino en Shin Megami Tensei y su Press Turn. Eso quiere decir que al inicio de cada combate, tanto tú como tus enemigos tendrán una cantidad de turnos definidos. Cada acción con cada personaje ocupa un turno, pero si logras aprovechar la debilidad de un enemigo, entonces esa acción solo cuesta medio turno, al igual que decidir pasar el turno de tu personaje al personaje siguiente. Fallar ataques cuesta dos turnos, y hacer ataques que el enemigo repele o absorbe te cuesta todo el turno de tu equipo. En pocas palabras, Press Turn es un sistema de combate parecido al de Persona, pero más difícil y más riesgoso.

Una adición interesante en Metaphor: ReFantazio es el de las habilidades síntesis. Dependiendo de qué Arquetipos tengas equipados en ese momento, cada integrante de tu equipo tendrá acceso a habilidades mucho más poderosas, pero que cuestan más maná y ocupan dos turnos. Sin embargo, muchas veces sí vale la pena pagar el precio, pues es en este sistema donde se encuentran los ataqies más poderosos y útiles de todo el juego.

Por supuesto, los enemigos también pueden hacer uso de estos sistemas. Caer en una emboscada puede significar tu fin sin que siquiera puedas meter las manos. A esto, hay que agregarle que es más necesario que nunca pensar por adelantado y saber identificar cuándo es óptimo defenderte, pasar el turno a un compañero o echar toda la leña al fuego y usar una habilidad síntesis. Un error en el momento incorrecto te puede costar la batalla entera.

La buena noticia es que Metaphor: ReFantazio incluye varias mejoras de calidad de vida, como la posibilidad de acabar con enemigos débiles sin tener que entrar a la pantalla de combate, reiniciar cualquier batalla en cualquier momento, o tener puntos de autoguardado muy frecuentes. Así que aunque la dificultad es mayor, nunca estarás a más de un par de minutos de tu próximo objetivo. Si a eso le sumamos la adición de las habilidades síntesis y la flexibilidad de clases del sistema de Arquetipos, está claro que este es el sistema de combate más refinado y completo de la historia de ATLUS.

Ser cool y hacerse notar

Por último, pero no menos importante, hay que hablar del diseño audiovisual de Metaphor: ReFantazio, que es tan increíble como siempre y a lo que ATLUS nos tiene muy (mal) acostumbrados. Por un lado, los menús y la interfaz fusionan colores pasteles con fondos de papel y trazos de lápiz, lo que recuerda a los muy populares bosquejos de Leonardo Da Vinci en la época renacentista. El diseño es espectacular y único, lo que demuestra lo muy comprometida que está la desarrolladora a realizar su construcción de mundo al máximo. Eso sí, aunque eventualmente te terminas acostumbrando, no está de más decir que tantos colores y efectos en todos lados en todo momento son un poco abrumadores y confusos al principio.

El diseño de arte es igualmente llamativo. Las ciudades, los pueblos y las construcciones tienen un estilo medieval, pero con toques renacentistas y hasta steampunk. Las personificaciones de los Arquetipos son sencillas en cuanto a cualidades físicas, pero cada una es clara y distinta, y destaca y transmite muy bien sus habilidades de combate. Y finalmente, los diseños de los humanos (monstruos) son terroríficos de una manera lovecraftiana. No son criaturas feas según nuestros cánones de la belleza… son horripilantes porque son parte monstruo, parte humano y parte objetos aleatorios. Son inexplicables e incomprensibles, son la encarnación del miedo que causa el valle inquietante.

Por otro lado, la música también es una novedad, dejando el pop, rap o jazz de lado y esta vez ofreciendo piezas orquestrales y de ópera, mucho más acordes con la temática y la ubicación, pero que son igual de pegajosas. El compositor Shoji Meguro y su equipo han sido pieza fundamental de los más recientes éxitos de ATLUS y aquí han creado nuevamente una banda sonora digna de las más grandes alabanzas.

Lamentablemente, Metaphor: ReFantazio sufre del mismo problema que otros juegos de ATLUS: la calidad de los activos es baja o en ocasiones hasta pobre. De igual manera, las pantallas de carga son extremadamente comunes y las caídas de cuadros son constantes. Eso sí, es importante mencionar ninguno de estos problemas afectaron de manera importante mi experiencia y que tampoco sufrí de ningún crasheo o siquiera un bug.

Al igual que la mayoría de los títulos de ATLUS, Metaphor: ReFantazio demuestra que un buen diseño audiovisual es mucho más importante que la fidelidad gráfica o el poder de desempeño en bruto. Aunque no voy a negar que a estas alturas, ya viene siendo necesario que el estudio empezara a actualizarse a nivel técnico.

Metaphor: ReFantazio es, sencillamente, el punto más alto al que llegado ATLUS. Tiene algunos problemas técnicos y de ritmo, pero es una combinación de décadas de experiencia y la puesta en práctica de los mejores elementos de Persona y Shin Megami Tensei. Lo más curioso es que un juego que está basado en tantos sistemas familiares, tiene la suficiente originalidad como para para demostrar con toda confianza que puede ser un nuevo pilar en la industria de los JRPGs.

Pros:

+ Una historia interesante, cautivadora y aterrizada

+ Personajes agradables y una verdadera sensación de compañerismo y amistad

+ El sistema de combate más refinado de la historia de ATLUS

+ Un deleite audiovisual

Contras:

– El ritmo al inicio es muy lento

– Técnicamente no está a la altura de otros títulos AAA