Muchos hemos inclinado nuestro cuerpo hacia los lados cuando jugamos un juego de carreras para tratar de evitar obstáculos (principalmente cuando es la primera vez que jugamos un videojuego). Pues ahora con el Kinect de Xbox One podremos usar esos movimientos dentro del juego.
Una presentación a puerta cerrada en el E3 reveló las capacidades del Kinect y nos mostró cómo se puede utilizar un torso como si fuera un tercer stick.
Inspirado en los movimientos que la gente hace naturalmente cuando está jugando un juego de carreras, Microsoft ha implementado este reconocimiento en el nuevo Kinect. Jeff Henhsaw nos explica:
Este escenario de carreras donde la gente se inclina en las curvas nos tiene muy molestos. Queríamos encontrar una forma para incorporar estas inclinaciones en el juego.
La consola ahora es lo suficientemente inteligente y poderosa para ver qué es lo que están haciendo los jugadores. Reconoce la inclinación y los factores del juego de una manera perfectamente natural y aún usando el control para moverse, apuntar y disparar, mi torso y mi espina dorsal son tratados como un tercer stick, uno que no está manifestado físicamente en el control.
De hecho, los desarrolladores utilizan una API («Interfaz de Programación de Aplicación» por sus siglas en inglés) para accesar al Kinect que hace parecer mi torso y mi espina dorsal como si fuera otro stick, incluido el movimiento en 360 grados.
Es fácil para los desarrolladores usar este tipo de funciones y es muy fácil para el jugador utilizarlas.
Otro ejemplo que se mostró fue cómo los jugadores pueden tocar rápidamente su sien para habilitar la vista de Rayos X o levantar el control para activar el escudo.
