Dragon Age: Inquisition se une a la ya extensa lista de títulos polémicos por tener una resolución diferente en PlayStation 4 y Xbox One. BioWare y Electronic Arts han dado a conocer más detalles técnicos de su RPG que llegará el 21 de Noviembre del presente año, anunciando primeramente que las consolas de nueva generación tendrán resoluciones diferentes, ya que la consola de Sony correrá sin problemas a 1080p, mientras que la plataforma de Microsoft se tendrá que conformar con los 900p al igual que otros títulos multiplataforma que han sido lanzados en los últimos meses.
De momento no se ha mencionado nada sobre la tasa de imágenes por segundo, pero lo más seguro es que se conserven los 30fps en ambas versiones del juego. Desde el estudio aseguran que han aprovechado al máximo el potencial de las consolas next-gen.
Hemos maximizado el actual potencial de cada una de estas plataformas.