Microsoft quiere despertar el interés por comprar un Xbox 360 en aquel país asiático, y es por eso que ha tomado medidas para hacerlo, por lo que bajar los precios es algo primordial.

 

El precio ha bajado cerca de 5,000 yenes, una consola de 250 GB costaba 28,381 yenes antes de impuestos y ahora queda en 23,600.

 

Microsoft espera que con esto se genere un nuevo interés en adquirir la consola y posteriormente juegos y porque no, llegar a comprar la consola de nueva generación, el Xbox One.