Un impulso de naturaleza netamente hipster trató de impedir (fracasando estrepitosamente por supuesto) que escribiera la presente columna sobre el tema del momento, el consentido, mimado, aclamado, olímpico y desde ya inmortalizado Grand Theft Auto V. Pero como muchos de ustedes bien sabrán el huracán Mainstream es siempre implacable, el poderío que un fenómeno convertido en tendencia de masas (por no decir moda) logra generalmente copar la totalidad del interés colectivo, solo sobre eso se habla, solo sobre eso se quiere escuchar.

 

De entrada advierto que soy un ignorante atrevido, que voy a hablar sobre un juego que ni siquiera he probado (y no creo que pueda durante un periodo de tiempo considerable), las penurias que un humilde proletariado aficionado a un lujoso entretenimiento debe soportar pueden ser merecedoras de un Oscar en la categoría de mejor película dramática. Pero no vengo aquí a quejarme de no tener dinero para comprar el juego de moda (esta bien, ya lo hice), sino a analizar como el poderío que un conjunto de factores ajenos a la calidad neta del producto, pueden potenciar considerablemente la percepción que sobre él tiene las grandes masas, porque hoy en día primero se le vende al inconsciente y después a la quincena.

Grand Theft Auto 5(1)

Habría que estar ciego y sordo para no darse cuenta de lo obvio, Gran Theft Auto V es un juegazo en toda regla, como siempre lo ha sido la saga y como la calidad que atesora su desarrolladora una de las más respetadas del sector (sino la que más) Rockstar Games. Esta empresa se ha ganado su reputación a fuerza de trabajo bien hecho, manteniendo siempre estándares de calidad muy altos, estableciendo la innovación como piedra angular de su filosofía empresarial y logrando generalmente desarrollos solido por un personal muy capacitado que desborda pasión por lo que hacen. Pero más allá del incalculable valor que una obra maestra como esta pueda guardar en sus entrañas, yo preferiría hablar más de un FENÓMENO con todo el peso de cada letra, porque la expectación, interés, avidez intriga e hype sobrepasan cualquier escala cuantitativa, cualquier 10 perfecto. Nunca había visto tal atención por toda la comunidad (usuarios, desarrolladores, prensa, forasteros, etc.) Ni siquiera con lanzamientos de nuevas consolas, nuevas IP, declaraciones o acciones polémicas, nada, nada parece paralizar este sector de la manera que lo hace cualquier información relacionada con el Sandbox por excelencia, con la libertad interactiva, con la interminable sátira a la violencia social y a la vida criminal, con Grand Theft Auto.

 

Rockstar Grand Theft Auto V se siente como un juego de nueva generación

 

250 millones de dolares como presupuesto para un videojuego es una barbaridad que avasalla fácilmente presupuestos de grandes superproducciones de Hollywood, y como lo dicta el protocolo empresarial actual una fuerte suma de esa cantidad fue destinada a publicidad/marketing, departamentos culpables de -me atrevo a decir- aproximadamente la mitad de esos monstruosos 1000 millones de dolares alcanzados en 3 días. Momento, antes de que me condenen al recoveco mas recóndito del inframundo permitanme repetir, no estoy poniendo en tela de juicio la calidad del titulo, ya dijimos que es superlativa, simplemente reflexiono acerca de la gran maquinaria que tras él se esconde, que se asegura de sembrar desde el anuncio y hasta la salida del titulo esa necesidad en cada cliente o no cliente potencial (cual droga adictiva) de adquirir el juego lo mas pronto posible o arriesgar a perderse el juego de la generación (entiéndase bien, afirmación un tanto desorbitada, no?) convenciendo de estar ante un producto sin precedentes, dejando en segundo termino su calidad real final, posibles errores o hasta gustos personales.

 

Que un amigo hace poco me haya comentado su interés en adquirir el titulo, nunca habiéndole interesado la saga y hasta burlándose de mi mientras jugaba GTA IV me dejo estupefacto, pero cuando entré al establecimiento donde adquiero mis juegos (una semana después del lanzamiento) y me tope con una gran cola para adquirir el titulo por un precio descabellado (al cambio serian aproximadamente  460$) caí en cuenta, esto no puede ser solo consecuencia de un único juego, es un movimiento, una tendencia, una fiebre, un fenómeno, una moda quizá, publicidad perfectamente ejecutada no lo sé, esto es definitivamente GRAND THEFT AUTO.