Red & Green fueron los encargados de presentarnos el mundo Pokémon, pero la caricatura tenía otros planes.
Pokémon debutó en dos diferentes versiones en febrero de 1996. Pokémon Red y Pokémon Green fueron los primeros juegos de la serie en llegar al Game Boy. Como seguramente recuerdas la portada de ambos títulos no incluía la presencia de algún Pokémon legendario, lo que teníamos en la cubierta era la evolución final de Bulbasaur (#001) y Charmander (#004), para Verde y Rojo, respectivamente.
Aquellos primeros cartuchos incluían todo lo que ha hecho popular a Pokémon: las primeras 151 criaturas de la Pokédex, los ocho gimnasios con sus respectivas medallas, la poderosa Elite Four, el terrible Equipo Rocket y un simpático protagonista de pocas palabras que después conoceríamos como Red. La idea de Pokémon estaba cobijada por Nintendo, pero en sus primeras semanas el interés por Pikachu y compañía no era nada del otro mundo.
¡Un Mew de evento apareció!
Como ya lo hemos explicado, todo cambió cuando la revista japonesa CoroCoro ofreció la oportunidad de sumar al Pokémon singular Mew (#151) a los cartuchos de los jugadores. La mecánica consistía en responder por medio de una carta algunas sencillas preguntas relacionadas con Pokémon, posteriormente los encargados de la publicación seleccionaron a 20 afortunados ganadores; éstos tendrían que enviar su cartucho a las oficinas de CoroCoro para que ellos les cargaran a Mew en su partida.
En internet se menciona que más de 78.000 personas participaron en el concurso de la revista, lo que posteriormente convirtió a los primeros juegos en los títulos más populares de Japón. Cabe destacar que la presencia de Mew no solo era un mito dentro del juego, pues en el desarrollo de Red & Green Mew se introdujo en el último espacio de memoria disponible en el cartucho, dejando como una incógnita su aparición en el futuro de la primera generación. Obviamente el resto es una historia de éxito para el legendario y la franquicia amarilla.
La aparición de Mew y el misterio alrededor del personaje llevaron a Pokémon a un nivel de popularidad tan inmenso que los videojuegos no podían ser el único medio para conocer este mundo. Al no tratarse de una serie cien por ciento de Nintendo, Pokémon pudo explorar otras vertientes como los juegos de cartas, manga, anime y un montón de licencias para comida, juguetes, tazos y mucho más. Sin embargo, la mayoría de los productos subsecuentes no se inspiraron en los diseños del videojuego, sino en la apariencia de los Pokémon que vimos en el anime.
Yo quiero ser siempre el mejor 🎶
El anime de Pokémon debutó en Japón prácticamente un año después de que los primeros videojuegos se pusieran a la venta. Se dice que Satoshi Tajiri, creador de Pokémon, obligó a los escritores del anime a jugar y terminar las primeras versiones de Pokémon en Game Boy para que pudieran entender por completo la idea del videojuego. De hecho, la trama general de Pokémon está totalmente vinculada a lo que vemos en los juegos… con la gran excepción de que siempre seguimos a la misma persona: Ash Ketchum, un joven entrenador originario de Pueblo Paleta.
En occidente, a diferencia de Japón, conocimos casi al mismo tiempo la caricatura como el videojuego, lo que terminó por dejar fuera de nuestra memoria la apariencia original de las primeras 151 criaturas. Y justo eso es lo que te vamos a mostrar a continuación… después de está larguísima, pero muy interesante, introducción al boom original de Pokémon y el anime homónimo.
Pokémon Red y Pokémon Blue debutaron en América el 30 de septiembre de 1998… ¡más de dos años después de su lanzamiento en Japón y más de un año después del estreno del anime! Y claro, como el mercado de Estados Unidos se comporta de manera muy distinto al japonés, el videojuego llegó a nuestros Game Boy con toda la fuerza mercadológica del anime y una muy bien preparada oleada de productos que incluso tuvieron grandes repercusiones en México y el resto de América Latina.
Sin embargo, fue desde 1996 que los jugadores japoneses comenzaron a vivir la transformación de la serie con el lanzamiento de Pokémon Blue, juego que ya cargaba en su memoria los diseños de una versión de Pokémon más similar a los que nos encontraríamos en el anime. Obviamente el cambio en Japón pasó desapercibido, pero una vez que la aventura de Ash Ketchum cobró fuerza en Tv Tokyo todo tuvo sentido.
Capsule Monsters
Cabe destacar que los diseños originales no son muy diferentes a las versiones finales, pero sí se nota un sentido más kawaii en cuanto a los rostros, poses y colores que se terminaron utilizando para la franquicia. Lo anterior es más claro cuando regresamos todavía más atrás en la historia de Pokémon y nos encontramos con Capsule Monsters, un documento de desarrollo en el que una muy joven versión de Game Freak, encabezada por Satoshi Tajiri y Ken Sugimori, le explican a Nintendo de qué va su idea para un videojuego de Game Boy.
Capsule Monsters también fue el primer nombre clave que tuvo Pocket Monsters; título que se terminaría unificando de manera global en Pokémon. Dicho documento nos deja ver como la idea de Pokémon evolucionó de criaturas similares a dragones y dinosaurios a un concepto que supera, por mucho, la relación entre una persona y su mascota. Lo brusco de los primeros Pokémon se perdió no solo por el anime, sino también como parte del diseño central de la serie para los primeros juegos.
Al principio algunos “entrenadores” tenían que recurrir a látigos o jaulas para controlar a sus Pokémon, al mismo tiempo que existía la posibilidad de comprar estas criaturas a lo largo de la aventura. La propuesta original de Game Freak fue escrita en 1990, lo que nos deja en claro que los seis años de desarrollo no solo fueron en pro del gameplay o la historia, sino también de todo el core de Pokémon ubicado en la relación entre entrenador y compañero Pokémon.
Lo anterior transformó a los enormes dinosaurios en derivados de animales que podemos encontrar en granjas, zoológicos e incluso la propia ciudad. El desarrollo de Pokémon fue avanzando de tal forma que las bestias más imponentes y «salvajes» fueron las primeras en crearse, para cerrar los diseños con los “animales” más comunes y que, en una buena jugada de creatividad, se convertirían en los “protagonistas” de la historia. Bulbasaur (#001), Charmander (#004) y Squirtle (#007), iniciales de Kanto, fueron de los últimos Pokémon en agregarse al juego.
La aparición de personajes más… animalescos, obligó a la estructura de la historia a abandonar los elementos de aprendizaje extremo como los látigos o la venta de criaturas sin ningún tipo de regulación. Recordemos que la idea de Capsule Monsters tiene como principal base la infancia de Satoshi Tajiri y sus aventuras coleccionando insectos en Japón. En general la franquicia está completamente vinculada a las buenas costumbres entre personas, medio ambiente y, por obvias razones, los animales.
Mientras tanto en los videojuegos no solo hubo un cambio del diseño que tuvimos en la fase beta de Red & Green, sino también lo que encontramos en la primer reedición con Pokémon Blue y posteriormente el rediseño completamente inspirado por el anime que vimos en Pokémon Yellow.
¡Pokémon está evolucionando!
Cada nueva entrega de la primera generación buscó definir el concepto gráfico de la serie en favor del resto de mercadotecnia relacionada con las 151 criaturas disponibles. Incluso el arte que te mostramos más arriba de Mew en la revista CoroCoro ya estaba completamente orientado a la serie animada… sin importar que los juegos tuvieran solo un par de meses a la venta y que el sprite de Mew fuera completamente diferente a la ilustración de Sugimori.
La imagen de arriba es una comparación de 9 de los Pokémon más importantes de la primera generación. Los iniciales de Kanto con sus respectivas evoluciones y sus cambios de Rojo / Verde a Azul y posteriormente Amarillo, éste último con todo el potencial gráfico del Game Boy Color y las poses que podíamos ver en el póster de los starters que Ash tiene en su cuarto en el primer episodio del anime.
Por supuesto que hay Pokémon en donde el cambio es más evidente, no solo por las capacidades técnicas de la consola, sino también por el enfoque que tenían dentro de la mitología en los juegos. El trío fantasma de Kanto nos ayuda a entender mejor cómo es que los nuevos lineamientos de la franquicia eliminaron rasgos «maliciosos» para dejar una apariencia encantadora… a pesar del origen y personalidad de las criaturas en cuestión.
Claro que no todas las criaturas tuvieron un cambio tan exagerado como el de Gengar (#094) o Charizard (#006). En las siguientes imágenes podrás ver como muchos de los cambios entre versiones fueron únicamente en relación a la posición del Pokémon, mientras que otros pasan por una edición completa de rasgos que van de lo grotesco a lo violento o en la definición completa de elementos distintivos como ocurre con Mr. Mime (#122) y Jinx (#124).
Evidentemente otros de los Pokémon que tuvieron cambios drásticos a lo largo de la primera entrega de la serie fueron los Pokémon legendarios. En Capsule Monsters se habla de estas peculiares criaturas bajo el nombre clave de “monstruos ilusorios”; pero su verdaderas intenciones se fueron creando a lo largo de los seis años de desarrollo del juego. Recuerda que incluso Mew se agregó de último minuto en Red y Green.
De la misma forma que los Pokémon iniciales, la identidad de los primeros legendarios se fue adaptando en favor de los objetivos principales de la franquicia. La primera película animada de Pokémon se estrenó apenas un par de meses antes de que los primeros juegos llegarán a Estados Unidos, la figura de Mewtwo (#150) y Mew (#151) en las ediciones americanas tenía que coincidir perfectamente con lo que los japoneses tenían un año viendo en la televisión y los respectivos promocionales de la primera película.
Hasta antes del anime no existía como tal la presencia de un Pokémon que sirviera como mascota de los juegos. La presencia de Venusaur y Charizard está más pensada en el objetivo de evolucionar a nuestro inicial y no en pro de convertirlos en la cara de Pokémon; por eso hay iniciales distintos en cada región. En cuanto al desarrollo del juego el primer Pokémon en ser creado fue Rhydon (#112), pero tenía más que ver con lo que ya comentamos de los dinosaurios que con ser una criatura importante en la trama.
Obviamente el anime tenía camino libre para elegir a una de las 151 criaturas disponibles y con los iniciales fuera de la jugada y los Pokémon legendarios pensados para otros objetivos, el equipo creativo optó por… ¡Clefairy (#035)! Aparentemente este pequeño Pokémon del Monte Luna fue el elegido para protagonizar la aventura junto con Ash, pero por azares del destino -y seguramente después de un largo focus group– fue sustituido por Pikachu (#025).
Después de ver su sprite en los primeros juegos es un poco raro que este roedor amarillo sea la gran estrella de Pokémon y la primera de estas criaturas en llegar al cine con su propia película live-action. Recuerdo que para mi fue una sorpresa no encontrar a Pikachu en los iniciales de Kanto al iniciar mi aventura en Pokémon Red, pues yo le entré al juego después de ver el anime. Incluso la apariencia de este Pokémon en el juego me sacó de onda porque no se parecía mucho al de la caricatura y tampoco figuraba como una criatura importante.
Vaya, encontrar a Pikachu en el primer juego te puede llevar al menos unas tres horas de forma lineal y sin perderte. Por lo que es todo un evento cuando por fin lo atrapas… y luego te decepcionas cuando descubres que no es tan fuerte como en la caricatura. Y claro, con el paso del tiempo es el Pokémon que más ha cambiado en relación a su diseño original, incluso en la caricatura cada temporada es más delgado.
Definitivamente existe un gran cambio de los primeros diseños y conceptos de Capsule Monsters a lo que terminamos encontrando en las ediciones Roja y Azul en América. Hoy en día parece imposible que la serie no se construyera con el objetivo de ser un fenómeno mundial, pero lo que en realidad tenemos frente a nosotros es el resultado de una serie de cambios y adaptaciones en favor de hacer más sencilla, divertida y emocionante la idea de todo el juego:
Atrápalos a todos…
Red & Green pudieron haber sido los únicos juegos de la franquicia si el “atrápalos a todos” no hubiera trascendido por culpa de Mew. Luego el anime transformó todo el juego en favor de los Pokémon salvajes y su relación con el mundo; concepto que, a pesar de formar parte de Capsule Monsters, apenas y se hace notar en algunos momentos dentro de la aventura por Kanto.
Más allá de tomar al anime como un burdo origen de los fanáticos, podríamos colocarlo en un puesto tan importante como el de los primeros videojuegos. Recordemos que la travesía en nuestro Game Boy era, además de muy personal, bastante impráctica por culpa de la pantalla monocromática y su tamaño; nuestra imaginación hacía prácticamente todo el trabajo a la hora de disfrutar de Pokémon Rojo y Pokémon Azul.
No todos tenían un Game Boy, pero la gente podía acceder a Canal 5 sin problemas. Pokémon se debe a su público y a pesar de que pudimos haber tenido un juego con personajes más “maduros”, la idea general trasciende las medallas, la Pokédex e incluso el competitivo, para buscar la forma de intercambiar a alguna de nuestras queridas criaturas con alguien más que comparta nuestra pasión por los Pokémon.