Uno de los juegos más esperados para la consola next-gen de Microsoft, es la nueva obra de Insomniac Games: Sunset Overdrive, título de acción con elementos de parkour en el que deberemos tomar las armas y enfrentarnos a oleadas de peligrosos mutantes. El equipo de Joystick Cloud ya tuvo la oportunidad de jugar lo nuevo de los creadores de franquicias como Resistance y Ratchet & Clank, ahora les contamos qué nos pareció.
Durante la prueba, tomábamos el control de uno de los diversos personajes que podremos controlar en la modalidad cooperativa. En la partida, teníamos la misión de proteger ciertos puntos del escenario de las numerosas oleadas de seres que nos asaltarían constantemente., teniendo así a nuestra disposición una gran cantidad de armamento y edificios, muros y cables para poder ir de un sitio a otro de manera rápida.
Antes de que comiencen a llegar las hordas de enemigos, el programa nos da la opción de recolectar munición, preparar nuestras armas e incluso, colocar trampas en todo el escenario. Tras ése minuto de calma, es cuando Sunset Overdrive se transforma en una experiencia frenética y de acción descontrolada.
La física y control del personaje, hace recordar a lo visto en juegos como Crackdown e InFamous, teniendo una vista panorámica del cuerpo de nuestro avatar, mientras que moverte por el suelo y las estructuras que te ofrece el escenario, requiere tiempo para que comiences a adaptarte. Una vez acostumbrado, la mecánica resulta ser muy simple y sencilla de ejercer.
Gráficamente, a pesar de lo caricaturescos que parecerían en primera instancia, los personajes están diseñados de una manera que causan simpatía y son agradables a la vista, sin perder su tonalidad adulta. El escenario en el que se llevaba a cabo la partida no era muy extenso, pero era perfecto para encontrarte rápidamente con los mutantes a eliminar, además de que contaba con una gran cantidad de elementos con los cuales nuestro personaje podía interactuar para así sacarle provecho al mismo. El juego está lleno de detalles y posee una muy peculiar presentación con paisajes abandonados y sombríos que se asemejan a los de la franquicia Dead Rising. En pocas palabras, Sunset Overdrive presenta un universo cuya calidad visual, a pesar de no ser impresionante, resulta acertado y llamativo.
Para accionar las armas en contra de nuestros enemigos, basta con presionar un botón, y dependiendo del tipo de armamento (puede ser un rifle de asalto, precisión, pesada…) podrás afectar a un número determinado de objetivos, mismo caso sucede con el daño. Algunas pistolas gozarán de suficiente munición, pero requerirás mayor número de balas para derribar a uno o varios enemigos, mientras que las armas pesadas, pueden lanzar granadas o ácidos que pueden eliminar a varios seres de un disparo, aunque éstas podrían terminar con el cargador vacío mucho más rápido.
Abrir fuego a diestra y siniestra mientras evades los golpes y ataques enemigos, llega a generar una experiencia de juego tan veloz y frenética que te obliga a no parpadear durante largos periodos de tiempo para no perder vistazo a lo que ocurre en el mapa, sin embargo, lejos de ser un defecto, el verdadero problema se gesta debido a la demasiado acción que ocurre, provocando que el usuario termine enfocándose a la eliminación de enemigos que a la realización del objetivo del grupo. Éste fenómeno llegó a ocurrir varias veces durante la sesión, pero habrá que esperar a la salida del título para comprobar si esto se da sólo en esta modalidad u en todo el título, de tratarse de lo último, podría tratarse de un asunto grave.
Finalmente, cerca del final de cada ronda, siempre aparecía un jefe final, el cual se trataba de nada más ni nada menos que un extravagante mutante más pero unas 10 veces más alto y robusto. Detener a éstas abominaciones termina siendo uno de los momentos más divertidos del juego, pues es aquí donde los 8 jugadores que conforman la partida, unen sus fuerzas para eliminarlas y así evitar que se fracase la misión en el último momento.
Una vez terminada la sesión, el juego muestra las estadística que se recopilaron durante la partida, ordenando a los participantes de manera descendente, colocando en la punta a aquel que consiguió el mayor número de puntos, siendo el colero quien haya aportado menos al equipo.
Al final, el juego de Insomniac Games a pesar de no ser la excelsa obra que se prometía meses atrás, deja un sabor agradable, resultando ser un título divertido en compañía de otros usuarios y muy original en su estructura. Una experiencia interesante y que seguramente conseguirá hacerse de una buena comunidad de seguidores que siempre encontrarán una razón por la cual volver a Sunset City.
Sólo queda esperar a su fecha de lanzamiento para descubrir si las virtudes de Sunset Overdrive terminan convirtiéndolo en un producto de notable calidad y muy original o como un juego cuya propuesta atractiva terminó por no cuajar.