Tanto el Xbox One como el PlayStation 4 llegaron con el pie izquierdo a China, ambas consolas están teniendo serias dificultades para que los usuarios de aquel país se decidan a comprar cualquiera de las dos plataformas. Si bien es cierto que el veto sobre los videojuegos fue eliminado, aún sigue habiendo censura sobre ciertos juegos que en el otro lado del mundo sí tenemos disponibles, el problema es que la mayoría de los títulos prohibidos son los mejores actualmente en el mercado.

 

Esta situación ha obligado a que las consolas tengan un catálogo muy limitado, así que los usuarios se plantean dos veces el desembolsar una cantidad de dinero considerable. Shuhei Yoshida, presidente de Sony Worldwide Studios ha hablado sobre este tema, asegurando que efectivamente, la censura está complicando seriamente su trabajo, pero afirma que para ellos sigue siendo una etapa de aprendizaje y harán todo lo posible por superar este gran desafío.