En BioWare quieren lograr que los usuarios sientan las emociones que los personajes tendrán como si fueran reales, dejando de lado a las relaciones sexuales entre los personajes ya que el equipo de BioWare dice que las relaciones íntimas de este tipo no deberían ser el objetivo final o la recompensa por establecer relaciones sentimentales entre los personajes del juego.

 

Mike Laidlaw de BioWare ha compartido algunas escenas que para él fueron situaciones que lograron transmitirle lo que sentían los personajes, y de esa forma poder saber qué pasará con ellos. Un ejemplo que usó fue el de la relación personal entre Joel y Ellie en The Last of Us que según afirma, fue tan profunda como para incluso preocuparte por ellos.

 

El momento más romántico en un videojuego lo viví cuando Jackie va al apartamento de su novia en The Darkness. Ella hornea un pastel, se sienta a su lado y te dan la oportunidad de ver al completo la película de ‘Matar a un Ruiseñor’ mientras ella cae rendida sobre tu hombro y se duerme. Eso es increíble.

 

Esa escena en concreto es lo más cercano que he visto en el mundo de los videojuegos a los diez primeros minutos de la película Up. Ambas escenas comparten el mismo propósito, que es hacer pensar a la audiencia. Realmente me importa lo que le pase a estos personajes.

 

Tampoco tendremos el sexo como objetivo final de estas relaciones. En su lugar, tratamos de crear lazos afectivos que sean genuinos, que te hagan decir ‘¡Hey tú! ¡¿A que ahora llega el beso!?’ Y sobre todo, dejar que los jugadores disfruten de ello, que sientan como si esa relación fuera algo real.

 

Por nuestro lado estamos totalmente de acuerdo con la decisión que ha tomado BioWare para Dragon Age: Inquisition y esperamos que tenga un excelente recibimiento de la gente.