Mojang ha sido uno de los estudios más prolíficos de los últimos años, todo gracias a su principal creación, Minecraft, el cual le ha dado la vuelta al mundo cosechando un gran éxito en ventas y halagos por parte de la crítica especializada. Tal fenómeno fue plasmado en un libro que lleva por título Minecraft: The Unlikely Tale of Markus Notch Persson and the Game that Changed Everything, escrito por Daniel Goldberg y Linus Larsson, quienes explican todo lo que hubo detrás de tal éxito.
Hasta aquí todo suena maravilloso, pero hay una parte de la historia que ha quedado pendiente: la compra de Mojang por parte de Microsoft y lo que hay detrás de ella; esta gran interrogante será contestada a través de una segunda edición del libro.
Por su parte el portal americano Wired ha podido acceder a un extracto muy interesante de la obra. En él, se explica que Microsoft llegó a un acuerdo con los integrantes del estudio muy simple: si aguantaban seis meses en la empresa tras la compra del gigante americano recibirían una bonificación de 300,000 dólares. Una forma de garantizar que la gente se quedaría, que el estudio no perdería su identidad y una más fiable para que los miembros de Mojang pudieran ver cómo trabajaba Microsoft.
Tras esta «prueba», casi todos los miembros de Mojang se terminaron quedando (a excepción de un solo trabajador) por lo que el libro también revela lo siguiente:
La noticia de la venta supuso un cambio importante en Mojang. Algunos llegaron a sentirse traicionados por la decisión. La moral llegó a desplomarse, parecía que el mundo llegaba a su fin.
Lo anterior fue declarado por un antiguo miembro de Mojang, quien también mencionó que el interés de Microsoft nunca estuvo en Mojang, estuvo en Minecraft, aunque para ello debía llevarse toda la empresa:
La gente que estuvo en la reunión escuchó a Matt Botty (uno de los directivos de Microsoft Game Studios) referirse a la compañía como Minecraft en lugar de Mojang, corrigiéndose a sí mismo rápidamente. Microsoft se había hecho con Mojang, pero lo único que le interesaba era Minecraft.
El libro en su nueva edición, sin duda pisará algunos cuantos callos cuando salga a la venta y nos dará una idea por parte de los lectores y amantes de los juegos, como una compañía de la envergadura de Microsoft, puede modificar un poco la esencia de todo un estudio desarrollador a costa de sus intereses.