Una de las características que más polémica causo durante los primeros días posteriores al anuncio de Xbox One, fue que el nuevo Kinect estaría siempre «alerta» para que el usuario iniciará más rápido a su consola. El objetivo de Microsoft con su nuevo sensor de movimiento es el antes mencionado, pero, dado a que este podría ser usado para otros fines más gubernamentales, los de Redmond han decidido anunciar su posición a posibles usos que el gobierno Estadounidense quisiera darle al sensor.
Ante la ausencia de una nueva ley, no creemos que el gobierno tenga la autoridad legal para obligarnos a nosotros o a otra compañía que haga productos con micrófonos o cámaras a proporcionar datos de vídeo o de audio.
La declaración la realizo un portavoz de Microsoft al sitio The Verge, en la que también mencionan que Kinect tendrá una luz que nos informará que este esta grabando al usuario.
Seguramente ni Micorosft ni el gobierno de Estados Unidos (espero) estén interesados en saber que hacemos mientras jugamos Call Of Duty o mientras estamos en nuestro hogar, pero bien dicen que: «más vale prevenir que lamentar», y ante la paranoia que existe en algunas personas es mejor evitar estos problemas antes de que sucedan.