No es noticia que Electronic Arts haya sido elegida por el portal Consumerist como la peor empresa de Estados Unidos en años consecutivos (2012 y 2013). Sin embargo, las modificaciones que la distribuidora ha implementado para mejorar su cultura organizacional (situación que impactó directa y positivamente sus servicios al cliente) están dando de qué hablar.
Según lo recuerda Larry Probst, CEO interino de la compañía durante 2013, los nombramientos de Consumerist lo molestaron. Pero aquella situación tan infortunada y quizás imprevista también lo incentivaron a instaurar cambios institucionales en beneficio de los consumidores. En aquellos días, Probst incluso prometió a sus empleados que, mientras respirara, tal escenario no se repetiría.
Entre otras medidas, Electronic Arts eliminó el Online Pass de sus juegos, incorporó un sistema de devoluciones en Origin, su plataforma de distribución digital, e incluso, colocó a algunos ejecutivos tras las líneas telefónicas para que atendieran las quejas de los usuarios personalmente. Hoy, y con la E3 2015 en puerta, la compañía pretende continuar con los lineamientos que la distanciaron de la percepción negativa de los consumidores y presentar un catálogo llamativo que apele a cualquier tipo de interés.
