En 2017 celebraremos el décimo aniversario de una buena cantidad de juegos que cambiaron la industria como la conocemos hoy en día. Adelantándose a los festejos, la primera entrega de la trilogía Modern Warfare se hace presente en Xbox One y PlayStation 4 con un trabajo técnico que nos deja en claro porque la franquicia estrella de Activision se mantiene como una de las grandes favoritas en la industria. Call of Duty 4, es el juego que abrió el camino a la serie para un público masivo, cambio las reglas en los títulos inspirados por la guerra y se volvió un estándar en el género de disparos.
Combate Moderno
Hace 9 años, Infinity Ward dejaba de lado la Segunda Guerra Mundial para centrar sus esfuerzos en un nuevo escenario de combate. La elección del estudio lo llevo a trasladar los conflictos armados a los tiempos actuales y tomar al Medio Oriente y Rusia como los sustitutos de los nazis. El cambio, aunque arriesgado, resulto ser un éxito en Activision, pues además de dar un giro a lo que veíamos desde el primer PlayStation, la campaña y su apartado multijugador, resultaron una agradable sorpresa para todos los jugadores.
Exagerando la tensión global que se vivía en 2006 y arriesgando en la narrativa, la historia del primer Modern Warfare nos lleva por un conflicto bélico realista, con armas que podíamos ver en los noticieros y situaciones que resultaban terroríficamente similares en los años subsecuentes. Como policía del orbe, es deber del gobierno estadounidense y británico, el salvaguardar los intereses de todo el mundo ante las destructivas potencias de oriente.
A lo largo del juego podemos tomar el control de distintos perosnajes, sin embargo, la mayoría de las acciones recaen sobre el soldado del SAS británico, John «Soap» MacTavish, y el marine de los Estados Unidos, Paul Jackson. La mezcla de protagonistas, situaciones en distintos puntos del globo y la narrativa cinematográfica, hacen de la campaña una aventura impresionante, tanto en elementos visuales como en lo que posteriormente veríamos en las secuelas de la serie.
La importancia del cambio que Infinity Ward propuso de Call of Duty 3 a Modern Warfare es la clave para los siguientes títulos de la serie, al grado de afectar a otros juegos del género como Battlefield, el regreso de Medal of Honor y hasta nuevas propuestas como HomeFront. A pesar de los lanzamientos anuales que ha tenido la serie desde hace varios años, es imposible negarnos a regresar a jugar con el capitán Price y compañía. No sabemos qué tanto en el aspecto multijugador, pero la campaña de Modern Warfare es suficiente para invertir en la remasterización de la serie.
Club de Ligue Aéreo
Probablemente sea el tiempo que ha pasado, pero Modern Warfare luce como la mejor remasterización de la última oleada que hemos tenido, siendo incluso superior a su contemporáneo Bioshock. Escenarios, modelado de los personajes y el increíble sonido que despliega la obra, cada elemento está muy bien cuidado y puede pasar fácilmente como uno de los primeros juegos que vieron su debut en Xbox One y PlayStation 4.
En su momento, CoD 4 se apuntó calificaciones superiores al 9, por lo que a mayoría de los cambios realizados para esta entrega tienen que ver con lo estético y el apartado jugable se mantiene intacto. Desde la cantidad de armas disponibles, los escenarios de combate, el control, la forma en que apuntamos, disparamos y nos movemos, todo se mantiene igual o simplemente no se nota una diferencia de una experiencia actual. Modern Warfare es, a mi parecer, el Call of Duty perfecto, no tiene nada que pedirle a las secuelas que se derivaron de él y su remasterización es la prueba viviente.
Eso sí, a diferencia de lo que podríamos pensar, el juego no incluye ningún agregado en relación a lo que generalmente se añade. No hay un doblaje en español, ni contenido sobre la realización del mismo. Evidentemente ese no es un punto en contra sobre lo que he mencionado, de igual manera hay que recordar que el juego vendrá en paquete con Infinity Warfare, siendo que la remasterización es el complemento de la nueva entrega.
Cabe destacar que el apartado multijugador de Modern Warfare se incluye en la remasterización, con un total de 16 mapas y todo el contenido con el que Call of Duty logro hacerle frente a Halo 3 en el otoño de 2007. Una vez que podamos probar el multijugador actualizaremos esta reseña.
En general, y sin tomar en cuenta los modos online, Call of Duty: Modern Warfare Remastered es una compra obligada para todos aquellos que no piensen en la serie de Activision como un referente de la industria actual de videojuegos. Además de ser un gran viaje nostálgico por una de las series más interesantes que hemos visto en los últimos años. Evidentemente nos hubiese gustado recibir la trilogía completa de una sola vez, pero por el momento debemos “conformarnos” con una de las historias que más increíbles que hemos visto en la última década.
