Reseña - Detective Pikachu Returns

El gran Detective Pikachu está de vuelta. Después de una entrega moderadamente exitosa en la era el 3DS, Nintendo volvió a dar un voto de confianza para que el investigador más adorable de todos los tiempos regresara a resolver más misterios. ¿Pero es Detective Pikachu Returns una secuela digna o mejora la fórmula original?

Un rayo de brillantez

Detective Pikachu Returns es una secuela directa de Detective Pikachu, el querido juego de 3DS. Aquí, seguimos los pasos del joven Tim Goodman, que con su amigo Detective Pikachu resuelve misterios y crímenes en Ryme City. La buena noticia es que a pesar de que este título es una continuación, también funciona de manera independiente. Aunque los eventos de la precuela sí son importantes, el buen Pikachu, que puede hablar, te los resume brevemente al inicio, para que sepas todo lo que necesitas saber.

A grandes rasgos, hace unos años Ryme City se vio envuelta en una serie de eventos desafortunados, debido a que una misteriosa droga llamada R empezó a afectar Pokémon, volviéndolos hiperagresivos. Y aunque Tim y Pikachu, con la ayuda de Mewtwo, salvaron a la ciudad, aún queda malestar en la mente de la gente.

Por un lado, el alcalde formó una agencia independiente cuyo objetivo es cuidar y supervisar a los Pokémon de la ciudad, manteniendo la paz y el orden mano a mano con la policía. Sin embargo, aunque las intenciones parecen buenas, hay un aire de misterio sobre este nuevo organismo. Por otro lado, Tim y Pikachu siguen buscando a Harry, padre de Tim y compañero original de Pikachu, que está misteriosamente perdido desde hace meses.

Detective Pikachu Returns hila su narrativa general a través de diferentes casos más pequeños. Y aunque todos pueden parecer inconexos, poco a poco comienzan a revelar piezas de un rompecabezas más grande que resuelve las grandes incógnitas de la premisa. De esta manera, aunque los casos en sí no son particularmente interesantes, poco a poco van revelando información sobre la trama principal, lo que te mantiene más enganchado. La cereza en el pastel es el mismo Detective Pikachu, que es agradable, gracioso e interesante, y es un verdadero deleite verlo tener sus momentos Eureka.

Elemental, mi querido Tim

Aunque Detective Pikachu Returns se vende como un juego de investigación, la verdad es que se parece más a un point-and-click y novela gráfica con un poco de jugabilidad esporádica. El bucle básico consiste en entrevistar gente con Tim, entrevistar Pokémon con Pikachu y analizar escenas del crimen con una lupa. Después, con toda la información recabada, Tim y Pikachu se ponen a deducir, con lo que obtienen respuestas a preguntas planteadas, que abren más preguntas, y poco a poco van resolviendo cada caso.

De vez en cuando, Pikachu se alía con un Pokémon para explorar o investigar más a fondo. Por ejemplo, Growlithe, que aparece en el primer caso, puede usar su gran olfato para seguir rastros de personas o Pokémon. O Darmanitan, que aparece en el segundo, puede romper rocas o bloques de hielo para abrir zonas nuevas.

El bucle de jugabilidad es básico, pero ciertamente muchos juegos de investigación lo usan. El problema es que en Detective Pikachu Returns no hay libertad alguna. Básicamente, Pikachu te va llevando de la mano a cada paso del camino, indicándote a dónde ir, con quién hablar, qué hacer, qué Pokémon usar o cómo investigar. Es imposible equivocarte, porque no hay manera de salirte del camino prestablecido. Por lo tanto, en lugar de hacerte sentir como un investigador, este título más bien te hace sentir como un simple acompañante del protagonista. Ni siquiera en los momentos de deducciones o interrogatorios te puedes equivocar, pues si eliges la opción incorrecta, Pikachu te indica que por ahí no va la cosa y te deja elegir de nuevo. Los elementos de puzzle o minijuegos son igualmente decepcionantes, pues son extremadamente sencillos, incluso más que los del título original de 3DS.

Nintendo siempre se ha caracterizado por incluir una doble capa de dificultad en sus títulos. La primera, sencilla, permite que cualquiera pueda jugarlos, incluso niños o gente que jamás ha tocado un videojuego en su vida. Y la segunda, compleja, otorga más estímulo y dificultad para personas que buscan un desafío mayor. Lamentablemente, esta segunda capa es inexistente en Detective Pikachu Returns. Es posible que esta jugabilidad le guste a tu hijo o tu sobrino de 10 años, pero si esperabas una experiencia que retara tus habilidades de deducción al menos un poco, aquí no la encontrarás.

Pikachi y Pikaño

Otro aspecto extremadamente decepcionante de Detective Pikachu Returns es el visual. Pokémon nunca ha tenido los mejores gráficos de las franquicias de Nintendo, pero cada día se nota más que se está quedando demasiado, demasiado atrás. Incluso, me atrevería a decir que esta entrega se ve aún peor que la antecesora, y eso que el otro título era de 3DS. Aquí, los modelados son pobres, las animaciones torpes y robóticas, el sincronizado de labios es astroz, los elementos tienen calidad de baja resolución y, quizá lo peor de todo, la iluminación es completamente inexistente, lo que hace cualquier escena vea totalmente antinatural. En general, Detective Pikachu Returns parece un juego de una época bastante antigua y definitivamente no está a la altura de los estándares de Nintendo y mucho menos de la industria actual.

Eso sí, no todo son malas noticias. Para empezar, ¡hay doblaje de voz! Y es moderadamente bueno, o en algunos casos, como en el del mismo Pikachu, hasta excelente. Aunque las escenas con voz son esporádicas, nos muestran un vistazo a una realidad alternativa en que los juegos de Pokémon están a la altura de otros juegos AAA del mundo.

Por otra parte, no hay que olvidar que Detective Pikachu Returns es un juego de Pokémon, por lo que los Pokémon deben ser las estrellas. Y vaya que lo logran. Aunque la exploración es limitada, siempre hay muchas criaturas con quien hablar, estés donde estés. Para empezar, es importante recalcar que los Pokémon tienen doblaje, al menos en cuanto a los sonidos que hacen. Y con esto me refiero a que realmente vocalizan sus nombres, como en la caricatura, lo que de entrada les otorga mucha personalidad. Y además, cada uno tiene algo que decir y cada uno tiene su forma de ser, que puede ser graciosa, seria, aburrida, enérgica, tonta, etc. Si bien no todos los diálogos son útiles, es interesante que, para variar, haya un juego en el que los Pokémon tengan más profundidad psicológica y sean retratados como algo más que simples máquinas de pelear.

Detective Pikachu Returns es un caso curioso. Por un lado, tiene una premisa misteriosa e interesante, y un protagonista agradable. Además, está lleno de Pokémon con mucha personalidad. Sin embargo, su bucle de jugabilidad y aspecto visual dejan muchísimo que desear. Si tienes niños pequeños, esta podría ser una buena entrada a juegos que estimulen sus habilidades de pensamiento. Sin embargo, si tú mismo estabas esperando eso, quizá mejor debas esperar una rebaja.