En julio de 2024, Nintendo publicó unos teasers en extremo extraños, mostrando a un hombre con una bolsa de papel en la cabeza, nombrando un misterio: ¿Quién es Emio?
La mente del Internet se fue volando: ¿por qué Nintendo, una empresa tan enfocada en juegos considerados infantiles, estaba publicando mensajes crípticos y tenebrosos?
La respuesta fue interesante, tanto en su naturaleza como en lo que proponía: Emio era el misterio principal de una nueva entrega para la poco explorada serie de Famicom Detective Club.
Aunque no conocía la serie más allá de la existencia de sus remakes publicados en 2021, no pude evitar sentir curiosidad: En serio, ¿Quién es Emio? Esta y muchas otras preguntas son establecidas por este nuevo juego, un misterio hecho y derecho, pero no solo por su idea, si no también por el hecho de que es el primero juego con clasificación para adultos hecho en la historia de Nintendo como empresa desarrolladora.
Si quieres la versión corta, puedo adelantarte que Emio – The Smiling Man: Famicom Detective Club es una historia para detectives impactante e interesante, capaz de mantenerte al borde de tu asiento durante toda su narrativa. Si quieres saber más, a continuación te contaré todo al respecto.
Un Club de [ ]
Famicom Detective Club, la serie de juegos de investigación exclusivos para Japón, tuvo el lanzamiento de dos remakes en 2021. Sin embargo, Emio – The Smiling Man es una historia completamente original, con un cambio impresionante de ritmo, contando con el regreso de Yoshio Sakamoto, guionista original (y un desarrollador también conocido por ser el creador de Metroid) y Kaori Miyachi, productora de los remakes.
Co-desarrollado con Mages, conocidos por sus innumerables novelas visuales, incluyendo Steins;Gate y la serie Science Adventure, Emio – The Smiling Man es una novela visual de investigación detectivesca mecánicamente simple pero temáticamente efectiva.
El juego tiene lugar unos años después de The Missing Heir, en algún momento de los años 90 en Japón – esta tercera entrega comienza con la muerte de un estudiante de secundaria en la ciudad de Koufuku. Eisuke, el joven en cuestión, fue encontrado muerto con la cabeza cubierta con una bolsa de papel, teniendo dicha bolsa un trazo de una carita feliz, algo que detona la alarma de la fuerza policiaca, ya que hubo unos asesinatos similares hace más de 15 años: este nuevo crimen revive la investigación, llevando a que la agencia de detectives Utsugi, el epónimo Club de Detectives, se integre como un consultor a la investigación de la policía.
La jugabilidad de Emio – The Smiling Man es bastante sencilla, prácticamente lineal: el jugador controla al joven asistente de detective de la Agencia de Detectives Utsugi (y cuyo nombre podemos elegir, a la usanza de juegos clásicos) o a Ayumi, la compañera de nuestro personaje, para dar un giro a las ideas y pensamientos que presentan nuevas perspectivas sobre el misterio. En nuestra investigación, podemos investigar las escenas del crimen o interrogar a personas de interés para encontrar detalles nuevos, todo a través de comandos sencillos pero diversos como “Hablar”, “Investigar” o “Mostrar”, entre otros.
Ya que los juegos anteriores de la serie lanzados para Switch eran remakes, éstos conservaban bastantes frustraciones de los títulos originales, en especial la existencia de demasiada prueba y error que provocaba el uso constante de comandos para encontrar el siguiente paso de la investigación. Sin embargo, el comando “Pensar” en nuestro repertorio de acciones funciona ahora como un auténtico sistema de pistas, en el que las reflexiones del personaje del jugador sugieren el siguiente comando a escoger o incluso avanzan la línea de pensamiento del interrogatorio del momento. Hasta cierto punto la prueba y error siguen existiendo, pero no se siente nada monótono, favoreciendo el avance constante de la historia.
Casi todos los capítulos terminan con el “Repaso” de la información obtenida en el día, recapitulando los conocimientos actuales del caso a partir de todo lo que nuestro personaje o Ayumi hayan aprendido. Durante este repaso, tenemos uno de los principales retos del juego: una clase de quiz en la cual tenemos que escoger la información correcta de las interrogantes del día. Esta sección es en extremo curiosa, en especial se pide al jugador que responda con opciones predeterminadas o que escribamos los nombres de sospechosos u objetos importantes del caso: en una de estas instancias tuve que escribir la palabra “suicidio” como respuesta a una interrogante, llevando a mi sorpresa de que sí, Nintendo autorizó la creación de este juego.
Eso sí, debo resaltar que en estos exámenes no se te penaliza seriamente por equivocarte en alguna pregunta; la persona que esté contigo simplemente te corregirá (o, en su defecto, el protagonista se corregirá a sí mismo después de pensarlo un poco) y notará que estás dando una respuesta errónea que no avanza el caso. Los 12 capítulos del juego con sus respectivos Repasos hacen que la rutina sea agradable: con una duración de entre 30 minutos y una hora cada uno, Emio – The Smiling Man parece una auténtica serie de [Detectives].
Oscura Oscuridad
Aunque Emio – The Smiling Man tiene varios momentos cómicos y desenfadados, con personajes que aligeran la tensión de la trama, poco a poco se convierte en el juego más oscuro de la serie en su capítulo final: de hecho, puedo decirte con total y absoluta seguridad que también se convierte en el juego más oscuro que Nintendo ha producido en su historia, dando justicia a la primera clasificación M de parte de la ESRB en la historia de la compañía japonesa.
Sin spoilear nada sobre el contenido o las cosas que suceden, solo puedo declarar que es sorprendente e incluso horripilante. El juego empieza con una temática inquietante, y aunque sí tiene los momentos ligeros que equilibran la experiencia, los capítulos finales del juego me dejaron sorprendido de que un juego así fuera producido e incluso co-desarrollado, por una compañía como Nintendo, conocida por llamar “juguetes” a sus videojuegos.
Aunque el misterio podría parecer un poco raro a veces (quizá sin sentido), estuve pegado a la pantalla durante toda la investigación, terminé Emio – The Smiling Man en el transcurso de un día entero porque necesitaba ver la conclusión de la investigación: ten por seguro que el misterio tiene un desenlace satisfactorio.
Todos los detectives, investigadores policiales, sospechosos y personas de interés albergan personalidad, ideas y direcciones claras, pero muchos también esconden aspectos interesantes bajo la superficie, lo que conforma un elenco variado e interesante para un juego que tiene como pilares tanto su historia como su caracterización.
Un Memorable Misterio
Contando los 12 capítulos del juego, así como contenido adicional como unas escenas esclarecedoras, arte conceptual y un reproductor de música, la investigación completa puede llevarte entre 8 y 12 horas. Esto, por supuesto, depende de qué tanto explores los espacios y sus detalles, así como qué tan rápido leas: es importante recordar que, al final del día, estos juegos son novelas visuales con ciertos elementos interactivos.
Como todo misterio, creo que es una verdad implícita que no hay mucho valor de rejugabilidad, pero sigue siendo interesante regresar al juego en una segunda vuelta, en especial por la excelente forma en la cual cuenta su historia y cómo los giros aprendidos pueden incluso llegar a entenderse conociendo la maraña de la trama.
Definitivamente, Emio – The Smiling Man: Famicom Detective Club, es una aventura tremenda: eso sí, ten cuidado, porque el juego no es para los débiles de corazón.
Con una historia sólida, personajes interesantes y una conclusión escalofriante, Emio – The Smiling Man es una historia de detectives que merece el tiempo de cualquier aficionado al género.
Pros:
+Historia atrapante
+Personajes interesantes
+Contenido sorprendente (para Nintendo)
Contras:
+Falta de reto, requiriendo solo prueba y error