A pesar de algunos fallos, Get Even se atreve a contar una historia compleja y memorable a través de una combinación de mecánicas de juego que uno no pensaría podrían funcionar armoniosamente
¿Qué? ¿Quién? ¿Cómo?
La amnesia es uno de los tropos más utilizados en cualquier clase de narrativa. Ya sea como hilo conductor de la historia o simplemente como un recurso argumental, hay algo muy seductor en encontrar un personaje que simplemente no puede recordar eso que era tan importante. Y la amnesia de Black y esa sed de recordarlo todo es el leitmotif que te mantiene pegado a tu asiento durante las 8 horas (o más) que dura la campaña de Get Even.
Después de un par de diálogos en off que no parecen tener ningún sentido, tomamos el control de Black, un hombre que despierta en una casa abandonada y en muy mal estado sin recuerdo alguno de dónde está o de cómo llegó ahí. Suena un celular, lo tomamos y leemos el mensaje: ‘No intentes salvar a la niña, no tiene sentido’. En ese momento un vago pero muy poderoso recuerdo invade nuestra mente. Una niña, secuestrada y atada en una silla. ¡Hay que salvarla! Así empieza un largo y muy doloroso proceso para recobrar todas nuestras memorias. Muy pronto empezamos a interactuar con un misterioso hombre llamado Red, quien actuará como un guía en ese proceso, aunque sus verdaderas intenciones son extremadamente difíciles de descifrar. ¿Realmente quiere ayudarnos o tendrá una razón ulterior para hacerlo?
Recordar es volver a vivir
Get Even tiene una narrativa excelente que, como puedes ver, comienza con una premisa cuando menos intrigante. A través de toda la campaña, Red nos ayudará de diferentes maneras a ir recuperando recuerdos e irlos entrelazando para armar el rompecabezas que es nuestro pasado, nuestro propósito, nuestra existencia. Entre algunos de los recuerdos que rememoraremos está el evento de la niña, una visita a una gran compañía y a un hospital psiquiátrico y hasta un atraco. Así, conoceremos diferentes ambientes y lugares, y todos ellos estarán llenos de coleccionables que añadirán más trasfondo a la siempre creciente narrativa y nos permitirán tener un panorama más completo que nos ayude a recordar el pasado de Black.
El juego está narrado desde una vista en primera persona, y logra conectar de buena manera diferentes tipos de juego. Disfrutaremos de disparos, un poco de puzzles, un poco de sigilo, una historia que se ramifica según las decisiones que tomemos y mucho más. Incluso, el celular es una de nuestras herramientas principales, pues con su variedad de aplicaciones nos permite ver el mapa, utilizarlo como linterna, como scanner o hasta como cámara térmica. Ciertamente, es agradable que un estudio se atreva a combinar diferentes géneros en lugar de encasillarse en uno solo, aunque una decisión así tenía que tener sus inconvenientes: sí, el gameplay se siente siempre fresco, aunque esto quiere decir que ningún elemento está desarrollado a la perfección. El juego de armas y los puzzles son muy sencillos y las decisiones que tomemos no afectan tanto el desarrollo de la historia como en otros juegos más enfocados a ese estilo.
Tomando en cuenta la duración de la historia y la amplitud y detalle de cada uno de los escenarios, la partida puede tornarse bastante larga, aunque afortunadamente, nada aburrida. La narrativa de Get Even es ciertamente compleja, pero también muy entretenida. Los guionistas hicieron un excelente trabajo logrando que la historia te atrape de a poco para que al final te des cuenta que llevas horas pegado a la silla. La conclusión es sorprendente sí, pero satisfactoria, por lo que sentirás que el tiempo utilizado en meterte a este mundo valió la pena.
It was your fault…
Lamentablemente, después de un rato, el gameplay puede llegar a cansar. Sí, es variado, pero después de algunas horas parece convertirse simplemente en un pretexto para retrasar el avance narrativo. Por razones que no voy a revelar, hay cierto aspecto específico del juego que tienes que repetir muchas veces, y aunque al principio es divertido, pronto empieza a parecer una carga. Por supuesto, esto es debido a lo ya mencionado, a que ningún aspecto está desarrollado a fondo. La narrativa es excelente; mientras que la manera en que logras que esta avance, no tanto.
En el aspecto audiovisual, Get Even es un juego de contrastes. La atmósfera es genial, con detalles visuales en cada ambiente que crean un aura misteriosa e inquietante durante la partida completa, a pesar de que la historia no sea propiamente de terror. Sin embargo, esta atmósfera pierde un poco de poder debido a que el aspecto gráfico deja mucho que desear, pues la iluminación tiene cambios bruscos, los bordes puntiagudos, y en general la resolución gráfica es mala tomando en cuenta que trata de ser realista. Por otra parte, el aspecto sonoro se saca un 10, pues las melodías y canciones que se utilizan a lo largo del juego se complementan muy bien con lo que está sucediendo en pantalla. La tensión sube si vamos caminando por un corredor oscuro y se relaja cuando hay luz; o una canción muy popera nos recuerda lo ridículo de cierta situación en la que nos encontramos. Además, el doblaje está muy bien realizado, pues también se complementa con el excelente guión.
Get Even puede apelar a muchos públicos diferentes. Su combinación de géneros (tanto narrativos como de gameplay) ayudan a que prácticamente cualquier persona que no le moleste el suspenso pueda disfrutarlo. La historia es compleja debido a que tiene diferentes capas, pero realmente es fácil de ir siguiendo. Aquéllos que solo quieran saber el desenlace podrán hacerlo sin problemas, pero las personas a las que les gusta la exploración podrán encontrar una gigantesca cantidad de fotos, recortes, cartas, dossiers, periódicos y más documentos que enriquecerán muchísimo el mundo en el que se encuentran Black y Red.
Sí, definitivamente hay problemas en este título: el aspecto gráfico deja mucho que desear y el gameplay, aunque variado, no está bien desarrollado y puede volverse algo tedioso. Pero la poderosa narrativa y el atrevimiento de este estudio para hacer algo diferente hacen que valga muchísimo la pena darle una oportunidad a este thriller psicológico.