La presentación con la que Xbox inició su 2023 reveló detalles adicionales sobre títulos conocidos, pero particularmente tuvo una sorpresa que muchas personas no esperaban: un título nuevo de Tango Gameworks, Hi-Fi Rush, el cual sería lanzado de manera digital inmediatamente en Xbox Series X|S y PC.
Ya que Tango Gameworks solo había creado hasta ese momento títulos de terror, el anuncio tomó por sorpresa a más de una persona: Hi-Fi Rush es un título de acción al estilo de Devil May Cry que integra elementos rítmicos al más puro estilo de Guitar Hero o Crypt of the Necrodancer.
La combinación de géneros y la calidad del título me ha impresionado tanto que considero a Hi-Fi Rush como la primera exclusiva de la nueva generación que es simplemente imperdible para los usuarios del ecosistema Xbox: ¡te cuento más al respecto en esta reseña!.
Al compás del corazón
El protagonista de la historia es Chai, un aspirante a rockstar de 25 años con un brazo roto. Después de apuntarse al proyecto Armstrong de las Industrias Vandelay, las cosas no eran como el joven esperaba, y es destinado a ser un recolector de basura: afortunadamente, un accidente causa que su reproductor de música terminara incrustado en su pecho, llevando literalmente el ritmo en su corazón.
El accidente provoca que Chai sea considerado un defecto, pero recibe poderes gracias a su afinidad rítmica, ya que al tener un ritmo interno, el cual controla a todo el mundo, puede convertir su brazo robótico original en una guitarra hecha con chatarra, pudiendo así vencer a los robots de Vandelay que quieren llevar al protagonista al deshuesadero. En el camino, Peppermint, una rebelde adolescente, y su gatito robótico, 808, reclutan a Chai a su causa, la cual llevará al grupo a luchar con los ejecutivos de Vandelay para salvar al mundo de un plan que robaría a todos de su libre voluntad.
La narrativa tiene una premisa sencilla, pero el guión está lleno de encanto y corazón. Con un enfoque temático en los valores que puede tener una familia, así como el poder que tienen los sueños e ideales de las personas, quizás no te sentirás atrapado por los giros de tuerca, pero sí por el hilarante humor, personajes encantadores y los coloridos ambientes que rodean al campus de las Industrias Vandelay.
Con guitarra en mano
El viaje a través de los 12 niveles de Hi-Fi Rush es emocionante en todo momento, gracias principalmente al sistema de combate que convierte cada pelea en una sesión de improvisación. Este sistema funciona a través de la música que podemos disfrutar en cada escenario, ya que cada ataque que ejecuta Chai se realiza al compás de la canción del momento. Apretar cada botón fuera de ritmo no imposibilita los ataques, solo aumenta su efectividad, por lo que equivocarnos en uno o dos compases no causa problemas catastróficos mientras aprendemos las mecánicas: afortunadamente, es posible activar una ayuda visual para reconocer los momentos en los cuales debemos apretar cada botón para obtener daño adicional o realizar poderosos ataques finales.
De igual manera, el sistema de combate va integrando elementos gradualmente, esto para no agobiar a los jugadores con una cantidad abrumadora de mecánicas: aunque primero solo podemos hacer combinaciones normales de golpes ligeros y pesados, poco a poco desbloqueamos combos, ataques especiales, desplazamientos con nuestro gancho, bloqueos con respectivos contraataques, modificadores para nuestras habilidades en la forma de chips e incluso ataques combinados con Peppermint y otros aliados, los cuales añaden más capas a través de enemigos que solo pueden recibir daño al recibir ataques de ellos.
Como buen juego del género, Hi-Fi Rush es fácil de aprender, pero difícil de perfeccionar: este mundo, el cual gráficamente se siente como una mezcla entre Viewtiful Joe y Jet Set Radio, se encuentra en flujo constante, lo cual también lleva a que cada nivel se sienta como una experiencia única y especial. Esto se enfatiza gracias a los enemigos, cuya variedad aumenta y adquiere una complejidad suficiente para mantener a los jugadores al borde del asiento, y se consolida gracias a los jefes, cuya personalidad y poderes son simplemente inolvidables: cada pelea es diferente e incluso integra elementos de juegos de ritmo tradicionales en sus mecánicas.
Shuffle/Repeat
Por supuesto que un juego con tanto énfasis en el ritmo debe de tener un buen soundtrack: Hi-Fi Rush se encuentra lleno de música, con pistas de artistas de renombre como The Black Keys, Nine Inch Nails y The Prodigy, pero también cuenta con canciones alternativas libres de problemas de derechos de autor, con pistas creadas por The Glass Pyramids que hacen de las peleas igual de entretenidas.
Para complementar el diseño de sonido, Hi-Fi Rush tiene un estilo artístico reminiscente a caricaturas de hace 20 años y juegos de esa época. La nueva generación de consolas ha traído consigo experiencias con fidelidad gráfica sorprendente, pero es en pocas ocasiones que esta fidelidad ha sido experimentada en estilos gráficos más sencillos; es gracias a ello que Hi-Fi Rush puede mostrar un estilo de cel-shading que se ve simplemente perfecto. El juego se siente como un título de Gamecube que acaba de ser revelado al mundo, pero con una integración perfecta entre cinemáticas y juego gracias a los beneficios de fidelidad gráfica y velocidades de carga modernas. Quizás uno de los elementos que se siente demasiado similar a títulos de esa época es el movimiento en segmentos de plataforma, el cual se siente rígido a comparación de la fluidez en combate: no obstante, estos espacios logran equilibrarse al no ser tan constantes o comunes.
La aventura es corta, pues toma aproximadamente 10 horas llegar a los créditos, pero tiene un alto valor de rejugabilidad, gracias a elementos desbloqueados al completar el juego, como la integración de cuartos de retos escondidos, atuendos que podemos adquirir para todos los personajes con la moneda del juego, dificultades adicionales e incluso una Torre del Ritmo llena de encuentros consecutivos con enemigos, algo así como el Palacio Sangriento en Devil May Cry.
Sleeper Hit
Hi-Fi Rush fue lanzado sin anuncios previos, después de cinco años en desarrollo y una sorprendente secrecía de parte de Tango Gameworks, un estudio que hasta hace unas semanas era conocido por su contenido sombrío. Un claro opuesto de The Evil Within y Ghostwire: Tokyo, este juego fue recibido inesperadamente como la primera exclusiva de Xbox en 2023.
Descubrir los elementos personalizables del juego y las formas en las que es posible hilar combos más allá de los 100 impactos me ha mantenido pegado al monitor, pero es el encanto de los protagonistas y el mundo de Hi-Fi Rush que el título logra llevarme al pasado sin perder de vista las ventajas de un videojuego desarrollado en el presente.
Después de un año falto de exclusivas como lo fue 2022, Hi-Fi Rush es una bocanada de aire fresco en más formas de lo esperado. El estilo artístico y las mecánicas de juego logran combinarse para crear una experiencia que puede disfrutarse por cualquier persona, ya sea un músico de profesión o un individuo que no tenga ritmo, y será considerada como una de las mejores de su tipo durante años.
Pros:
+Increíble jugabilidad de acción rítmica
+Espectacular dirección de arte
+Excelente soundtrack
+Buenas recompensas a la rejugabilidad
Contras:
-Movimiento tosco en segmentos de plataformas