Si bien el Universo Cinematográfico de Marvel tiene un rol histórico en el cine, todos esos legendarios personajes de superhéroes no siempre han tenido tan buenas adaptaciones en los videojuegos. Esto ha mejorado un poco en los últimos años, pero el mal recibimiento que tuvo Marvel’s Avengers -de Crystal Dynamics y publicado por Square Enix- hizo que la gente dudara en extremo de Marvel’s Guardians of the Galaxy -desarrollado por Eidos-Montréal y publicado también por Square Enix-. Pues te tengo una excelente noticia: Guardians of the Galaxy es excelente de principio a fin y ofrece una experiencia encausada y divertida.
El inicio de la leyenda
Antes de las excelentes películas de James Gunn, los Guardianes de la Galaxia eran un grupo relativamente desconocido para las masas. No obstante, a estas alturas, los nombres Star-Lord (Peter Quill), Gamora, Rocket Racoon, Drax y Groot son prácticamente de conocimiento público en el mundo geek. Naturalmente, las comparaciones son inevitables, especialmente ahora que los guardianes son tan queridos, y en ese sentido debo hacer una aclaración. En primer lugar, los modelos son ligeramente parecidos a sus contrapartes, aunque no mucho, realmente. Star-Lord no es igualito a Chris Pratt ni Gamora es una Zoe Saldaña región 4, aunque puedan llegar a llevar atuendos parecidos o tengan características físicas que te parezcan familiares. Dicho esto, la excelente química que existía entre los personajes en las películas que maravilló a la gente, aquí se mantiene intacta. De alguna manera, Eidos-Montréal logró imprimir suficiente individualidad en los protagonistas de Marvel’s Guardians of the Galaxy como para que este nuevo equipo parezca una divertida versión alternativa y no una simple copia barata de lo que ya conoces.
Marvel’s Guardians of the Galaxy no es una historia de origen de cómo se conoció este grupo de inadaptados aventureros espaciales, sino una historia de origen de cómo se volvieron un equipo de verdad. Desde el inicio de la aventura todos ya están juntos en la Milano e incluso ya han llevado a cabo algunas misiones, siempre con el objetivo de poner el nombre de los Guardianes de la Galaxia en el mapa. No obstante, hay una clara tensión en el ambiente: por ejemplo, Rocket se la pasa discutiendo con Star-Lord sobre quién es el dueño de la nave y cuestionando sus habilidades de liderazgo, y Drax no deja de atacar a Gamora y llamarla «traidora y asesina», por haberse bajado del barco de los ideales de Thanos, a pesar de ser su hija. Es a lo largo de la grandiosa aventura que viven juntos que todos estos locos comienzan a unirse de verdad, por lo que la evolución de personajes es palpable a lo largo de la campaña de unas 20 horas de duración.
Específicamente, Marvel’s Guardians of the Galaxy se enfoca en un conflicto que poco a poco va escalando y que, literalmente, pone en peligro a toda la galaxia. Resulta que una religión conocida como La Iglesia de la Verdad, que parecía olvidada, revive repentinamente y empieza a convertir a todos y cada uno de los habitantes del universo gracias al poder de una mesías conocida como La Matriarca y la promesa de una realidad mejor. Por supuesto, la Iglesia de la Verdad no es tan buena como parece y tiene planes ocultos, los cuales Star-Lord y el resto de los guardianes deben detener a toda costa.
Lo interesante del asunto es que esta no es solo la historia de cómo Star-Lord y compañía salvan la galaxia, pues la narrativa también se enfoca en ellos como personajes, en sus sagas personales y en sus conflictos del pasado. Marvel’s Guardians of the Galaxy sí es una aventura épica a nivel sideral, pero también una aventura reconfortante a nivel personal y grupal.
De la comunicación nace la amistad
Hay varias razones por las que la narrativa de Marvel’s Guardians of the Galaxy es tan cautivadora. El guion a nivel general es excelente y la actuación de voz es destacada para prácticamente todos los personajes (especialmente Gamora y una chica llamada Nikki), pero en mi opinión lo mejor de todo son los diálogos. Verás, este es el juego que más me ha hecho reír y uno de los que más me ha tocado el corazón en todo el año.
La estructura de Marvel’s Guardians of the Galaxy es de un juego de acción y aventura relativamente lineal, basado en capítulos y con muy poca paja. La narrativa está totalmente encausada, por lo que los desarrolladores decidieron exactamente cuándo cada personaje dice cada cosa o cuándo se ejecuta cada cinemática. Entre capítulos te encuentras a bordo de la nave Milano, que puedes explorar libremente y en la que puedes platicar con cada uno de los demás integrantes de la tripulación, considerando que tú controlas a Star-Lord. Por otra parte, los niveles son lineales: comienzan contigo y el resto de los guardianes bajándose de la nave y caminando lentamente hacia algún objetivo en frente, a lo lejos, ocasionalmente enfrentándose a enemigos. Y si bien esto puede parecer un poco aburrido, la verdad es que todo está fríamente calculado: con esta estructura, los personajes tienen el tiempo para pasarse todo el tiempo platicando. Y cuando digo todo el tiempo, me refiero a todo el tiempo. Realmente, hay pocos momentos en todo el juego en el que los guardianes estén en silencio.
La clave, por supuesto, es que estas charlas siempre son siempre interesantes, profundas o divertidas. Ya sea Rocket peleándose con Drax porque éste le dijo animal; Gamora platicándote sobre su pasado con Thanos y Nébula; o Groot mencionando una y otra vez su nombre con diferentes inflexiones para demostrar aprobación o desaprobación, este es un título en el que siempre tienes que estar atento para escuchar lo que se está diciendo. De verdad, no te miento al decirte que en muchas ocasiones me reí en voz alta por algún comentario estúpido de Star-Lord, alguna traducción de Rocket sobre algo que dijo Groot o especialmente alguno de los increíblemente graciosos comentarios de Drax, siempre literal porque no conoce el sarcasmo. Aunque esta constante charla me parece de lo mejor del título, si debo mencionar que quizá los desarrolladores le dieron a Rocket una personalidad demasiado bélica a nivel narrativo que puede llegar a cansar un poco.
Por otra parte, también hay algunos puzzles ambientales que debes resolver con la ayuda de los otros guardianes. Por ejemplo, es posible que debas jalar una palanca que está en un lugar muy alto y que Peter no puede alcanzar. Para ello, podrías pedirle a Gamora que corte una cuerda, lo que cause que caiga una gran caja al suelo; caja que Drax puede cargar y colocar para que te sirva de escalón. Cada guardián tiene diferentes habilidades que sirven para completar estos puzzles, los cuales ayudan a ofrecer más variedad de jugabilidad más allá del combate y el diálogo constante.
Otra de las razones por las que la estructura narrativa semilenta de Marvel’s Guardians of the Galaxy funciona tan bien es que los escenarios son sencillamente alucinantes, son extraordinarios, y simplemente tienes que admirarlos. De verdad, me parece que el diseño artístico se merece un 10 cerrado, pues presenta de manera muy acertada la idea de que allá afuera, en el universo, las cosas son muy diferentes a la Tierra. A lo largo de los capítulos visitarás zonas espaciales rosadas, interiores de naves tan plateadas que deslumbran, páramos con semicírculos flotantes de hierba, metrópolis cyberpunk llenas de colores neón y hasta páramos de hielo helados. Cada nuevo capítulo te encuentras con un escenario completamente diferente que te quita el aliento y al cual le tienes que tomar al menos 400 fotos. Así, de verdad no molesta en lo absoluto ir caminando y escuchando a los demás.
Ahora bien, aunque el diseño de Marvel’s Guardians of the Galaxy es relativamente lineal, sí hay un poco de exploración. Durante los niveles, tienes la posibilidad de buscar caminos ocultos u alternativos, que conducen a recursos para comprar mejoras, coleccionables para desbloquear conversaciones extra en la nave Milano o, especialmente, atuendos para cada uno de los guardianes. Cazar atuendos es particularmente divertido, pues cambian dramáticamente su apariencia, son el coleccionable más escondido o difícil de conseguir y, en general, tienen diseños estupendos. Eso sí, si extrañas la libertad, hay al menos un capítulo en el que te vas a poder mover y explorar a tus anchas.
¡Guardianes, unidos!
Tal vez los párrafos anteriores hagan parecer que Marvel’s Guardians of the Galaxy es un juego totalmente basado en los diálogos, pero la realidad es que el combate es bastante importante y, de hecho, muy frenético. Verás, en cada nivel, a medida que vas avanzando, e intercalados con las cinemáticas y el diálogo, hay muchos, muchísimos encuentros contra enemigos. En este sentido, la estructura del juego es muy parecida a UNCHARTED, por ejemplo.
Durante todo el juego tú controlas a Star-Lord, y esto se mantiene en el combate, así que no puedes usar a los demás guardianes. Como sabes, Peter Quill tiene unas pistolas de energía y en este caso en particular tiene rayos elementales que vas consiguiendo poco a poco. Así, debes disparar a todo lo que se mueva para ir reduciendo su vida poco a poco, y ayudarte con los rayos para congelar o electrificar a los enemigos. La realidad es que Star-Lord no es muy poderoso, por lo que todo el sistema de combate está enfocado en comandar a los otros guardianes y hacerlos usar sus habilidades para realizar combos.
Con la presión de un botón, activas un menú de habilidades que vas desbloqueando poco a poco para Peter y el resto de los guardianes y que puedes usar bajo demanda. Naturalmente, cada guardián tiene habilidades diferentes, por lo que tienes que combinarlas de mejor manera para hacer la mayor cantidad de daño en el menor tiempo posible. Por ejemplo, Groot puede atar a un grupo de enemigos con sus raíces, el cual después puedes debilitar con una bomba eléctrica de Rocket y terminar de asesinar con ataques poderosos de Drax o Gamora, o incluso con un golpe cinemático grupal. Cada guardián tiene 4 habilidades desbloqueables, cada una muy diferente, por lo que las posibilidades de ligar combos son muy interesantes.
Marvel’s Guardians of the Galaxy de hecho te incentiva a actuar así: prácticamente la única manera de conseguir vida es haciendo movimientos definitivos y hay recompensas de experiencia por utilizar habilidades diferentes y combinar combos de los guardianes. La experiencia se utiliza para comprar las susodichas habilidades, así que es bastante notorio que todo el sistema está basado en esta colaboración bajo tu mando.
Debo aceptar que el sistema de combate de Marvel’s Guardians of the Galaxy es bastante entretenido y divertido. No obstante, también hay que aceptar que Star-Lord tiene el conjunto de movimientos más aburrido, pues solo tiene sus pistolas elementales. No puedo negar que a veces me daban ganas de yo mismo controlar a Gamora, que se mueve rapidísimo; o a Drax, que destruye todo lo que toca; en lugar de a Peter Quill. Pensando en una posible secuela, me encantaría que Eidos-Montréal pudiera expandir el combate para permitir la elección libre de personaje.
La última mecánica del combate se llama Reunión y en el papel suena muy bien, pero en la ejecución no está muy bien aplicada. Resulta que, para bien o para mal, Star-Lord es el líder de los Guardianes de la Galaxia, por lo que siempre será su labor levantárles los ánimos en los momentos de dificultad. En este juego, si crees que estás a punto de perder una batalla, puedes apretar una combinación de botones para invocar una reunión de equipo. En ese momento, la acción se detiene y los guardianes hacen una team-back y te expresan cómo se están sintiendo en ese momento. Dependiendo de lo que oigas, eliges una respuesta que, o les sube los ánimos a todos, o al menos a ti. Automáticamente, los guardianes recuperan toda la vida, aumentan su daño y, sobre todo, el walkman de Star-Lord comienza a sonar a todo volumen y acompaña el resto del encuentro.
Lamentablemente, en cuanto a diseño de jugabilidad no tiene mucho sentido que toda la acción se pare en seco y se cambie a un silencioso momento de planeación, especialmente cuando el combate es tan frenético y lleno de gritos. Pero de nuevo, lo más importante es que esta mecánica activa el walkman de Star-Lord, así que definitivamente la utilizaba cada que podía.
Y QUE VIVA EL ROCK N’ ROLL
Como sabes, uno de los rasgos más importantes de Peter es que se quedó atrapado en los 80, al menos culturalmente. De hecho, a lo largo del juego vemos escenas de su juventud, cuando el glam rock y el hard rock eran la moda del momento. Lo mejor con lo que Peter se quedó de esa época, obviamente, fue con la música y debo aplaudirle a Eidos-Montréal y a Square Enix por no escatimar en lo absoluto en este detalle. La banda sonora de Marvel’s Guardians of the Galaxy es sin duda alguna la mejor que he visto en un juego en la historia, pues tiene una veintena de canciones licenciadas de la dorada época. Sí, tal vez estoy un poco sesgado porque el rock es mi género favorito y los 80 son mi época favorita, pero te juro que ver increíbles cinemáticas o luchar contra monstruos y extraterrestres al ritmo de canciones como Don’t Worry, Be Happy; The Final Countdown; Never Gonna Give You Up; Take On Me; White Wedding; o We’re Not Gonna Take It; es un sueño que jamás me imaginé. Mi única queja, de hecho, es que me parece que las legendarias canciones no se utilizaron lo suficiente narrativamente. Al menos, las puedes reproducir a placer en la bocina en la nave Milano, así que algo es algo.
Lo último que me falta por mencionar es el rendimiento y los extras, y en este sentido Marvel’s Guardians of the Galaxy cojea un poco. Por un lado, el menú de accesibilidad es increíblemente vasto y flexible, por lo que este es un juego que podrán disfrutar fácilmente personas con alguna discapacidad o con poca habilidad de reacción. Además, gráficamente se ve impresionante: los modelos de personajes, las expresiones faciales y la sincronización de labios es de lo mejor que he visto hasta ahora; y también hay texturas de alta calidad, y efectos de partículas e iluminación grandiosos. No obstante, me encontré con una cantidad grandísima de bugs, glitches y errores: tuve un par de crasheos, errores de sincronización de audio y video, personajes que desaparecían en cinemáticas y varias veces tuve que recargar la partida porque algo que debía hacer simplemente no podía hacerse por un error. Aunque numerosos, no considero ninguno de estos problemas como grave, pues seguramente se irán solucionando con el tiempo y nunca me hicieron perder más de un par de minutos de juego.
Conclusión
Después de Marvel’s Avengers, la gente ya no quería confiar en Square Enix para seguir creciendo el Universo Gamer de Marvel. Sin embargo, estoy aquí para decirte que Marvel’s Guardians of the Galaxy es justo la prueba que el mundo necesitaba para demostrar que esto sí puede y sí debe hacerse. Este título es divertido y entretenido de cabo a rabo, tiene un diseño artístico precioso y un guion que te lleva por una montaña rusa de emociones. Sí, hay errores técnicos, pero esta es sin duda una de las mejores experiencias gamer que he tenido este año, si no es que la mejor.
Pros:
+ Guion épico, personal y divertido
+ Diseño artístico asombroso
+ Técnicamente impresionante
+ ¿La mejor banda sonora en la historia de los videojuegos?
Contras:
– Varios errores técnicos
– Se extraña controlar a otros guardianes además de Star-Lord