Y aquí estamos ante un nuevo videojuego basado en alguna reconocida franquicia cinematográfica. Tras títulos como The Lord of the Rings: War in the North y Lego: The Hobbit, parecía que el universo ideado por J. R. R. Tolkien comenzaba a perder inspiración dentro del mundo gamer. Sin embargo, lo mejor sólo estaba por venir.
Con la producción de Warner Bros: Interactive Entertainment y desarrollo del estudio americano Monolith Productions, hemos recibido una obra que tanto quienes gustan de los libros y películas de The Lord of the Rings, o simplemente, para los que buscan experimentar un juego de alta calidad, hablo de Middle-Earth: Shadow of Mordor. Un título que no sólo está a la altura de la obra escrita por el autor inglés, sino que también cuenta con la calidad audiovisual de los largometrajes de Peter Jackson, y finalmente, pasión por parte de los responsables del juego.
En conjunto, una experiencia que es, sin duda, una de las mejores del año.
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La venganza de un muerto
Middle-Earth: Shadow of Mordor, cuyo desarrollo se desenvuelve entre los acontecimientos de The Hobbit y The Lord: of the Rings: The The Fellowship of the Ring, consigue atrapar al usuario desde el primer minuto de juego, con un memorable prólogo donde nos introducirán a nuestro protagonista: Un guerrero de nombre Talion, quien tras ser asesinado junto a su familia, le es impedido perecer debido a la caída de una maldición sobre sí. Tras dicho acontecimiento, al cuerpo de Taion entrará el espíritu de un viejo y poderoso Elfo: Celebrimbor. Ambos deberán unir fuerzas para descubrir el misterioso pasado de éste enigmática entidad, y por supuesto, llevar a cabo la venganza de Taion hacia aquél que lo maldijo y le arrebató a su familia.
Bajo ese contexto comienza el título de Monolith Productions. Para ir superando la historia deberemos completar las 20 misiones principales que conforman el videojuego, la cual se desarrolla en todo momento de manera excepcional, lleno de misterio, acción y drama. Y aunque el guión no esté a la altura de la maestría realizada por J. R. R. Tolkien en la trilogía original, Monolith Productions ha puesto sobre la mesa una historia oscura, bien contada, interesante, con personajes y locaciones clásicos de El Señor de los Anillos y sobre todo, satisfactoria. El viaje que emprenderemos junto a Taion y Celebrimbor nos llevará recorrerlo alrededor de 10-15 horas (Cantidad que se triplica gracias a las misiones secundarias), y que a pesar de sentirse breve, siempre habrá una buena razón para repetir alguno de los muchos momentos memorables que ofrece Middle-Earth.
Al ponernos en la piel de Taion y Celebrimbor, tendremos todo Mordor, representado en un detallado mundo abierto, a nuestra disposición para ser explorado. El escenario presenta una gran variedad de ambientes yendo de bosques a montañas, pasando por pueblos y espeluznantes sitios de tortura en donde encontraremos diversos tipos de enemigos que forman parte de la tropa de Sauron. Desde el primer momento podremos ir a donde queramos, eligiendo el orden y el tipo de misiones que queramos realizar: Principales o secundarias.
Combatir enemigos, y cumplir tareas alternas como liberar prisioneros, nos hará ganar puntos de experiencia, los cuales llegado cierto punto, nos dará la posibilidad de comprar “Habilidades” como serían movimientos especiales o combos de ataque y defensa para perfeccionar nuestro desempeño en combate. Algunas habilidades estarán disponibles para ser desbloqueadas en cualquier momento, sólo necesitaremos tener la experiencia necesaria. Pero para otras mejoras, sí será necesario haber terminado alguna misión de la historia principal, una secundaria o una acción en específico. Cerca del final del juego es cuando podríamos presumir a nuestro personaje alcanzando su versión final, poseyendo los atributos que más se adecúen a nuestro estilo de lucha.
Y esto no es todo, ejecutar a cada líder de un grupo de Uruk nos proporcionará runas, éstas nos permitirá asignar efectos a nuestro armamento para infligir mayor daño o generar un ataque secundario, por ejemplo, envenenamiento.
Gracias a la unión entre el guerrero de Gondor y el espíritu de Celebrimbor, podremos interactuar entre los llamados “Mundo físico” y el “Mundo espectral.”. En el primero, es donde se desarrolla la gran mayoría del juego, donde podemos apreciar tal como es el entorno, disputar combates y en el que tenemos el control de Taion. Pero en el Mundo Espectral, allí controlamos al Elfo, al pasar a éste plano, podemos encontrar objetos y elementos ocultos dentro del mapa y con él también podemos identificar a nuestros blancos primarios. Ésta dualidad agrega frescura a cada una de las misiones de asesinato que cuenta el título, añadiendo un toque de estrategia y exploración al no tan extenso pero basto escenario presente en Middle-Earth: Shadow of Mordor.
Allí, cerca de Tolkien y de Jackson
Durante el transcurso del guión, como adelanté durante los primeros párrafos, deberemos dar con el responsable de nuestra situación: La Mano Negra de Sauron. Pero para dar con él, hay que conseguir información. Para ello, el juego introduce un sistema de interrogatorio. Durante los combates, sobre todo contra los líderes Uruk, una vez haber sido heridos a un punto crítico, bastará con interrogarlos, antes de ejecutarlos. La maniobra, más allá de ser un simple requisito para seguir progresando a través de los hechos, puede aplicarse a cualquier rival dentro del juego, pudiendo obtener información acerca de no sólo el paradero de tu objetivo, también una breve descripción en donde encontraremos su personalidad, conducta, así como virtudes y defectos de su combate para así sacarle provecho a la hora de ir a darle muerte. De igual forma es posible obtener detalles sobre la relación entre los prpios miembros del ejército de Sauron, y gracias a ello, eliminar a ciertos personajes llega a influenciar el mundo que nos rodea y la forma de actuar de nuestro enemigo, así como aumentar o disminuir la presencia de los mismos. Punto que nos pondrá a pensar y elegir nuestras víctimas más sabiamente, dando aún más estrategia al ya notable y complejo universo.
Gráficamente el juego es impecable, presentado un más que adecuado diseño tanto para nuestro personaje principal, elenco y escenario. Tanto los protagonistas como los enemigos están bien diseñados, contando con una gran cantidad de detalles, pudiendo observar tanto rasgos físicos del rostro y armadura, así como suciedad y sangre debido al contacto que se tiene con los elementos del escenario y las propias batallas. El resto de bestias y mutantes presentan las mismas desfiguraciones, heridas y tonalidades como los recordamos en su contraparte fílmica. Las texturas también presentan un nivel alto, siendo las de más baja calidad casi imperceptibles para el jugador.
El mapa, como ya dije, da la sensación de que podría ser más amplio pero es lo suficientemente variado como para nunca aburrirte de él. Siempre sufriendo cambios en su aspecto debido a las condiciones climatológicas que variarán dependiendo si es día o noche, si está soleado o cayendo una tormenta, al igual que los movimientos y cantidad de enemigos en determinadas zonas. La iluminación logra efectos impresionantes que te harán sentir completamente en la llamada “Tierra Media.”
Para ir de un lugar a otro, puedes hacerlo a pie o subiendo sobre un animal para utilizarlo como montura. Pero el método más eficaz será “Activar la forja”, las cuales son altas torres que encuentran en varias partes del mapa, en donde deberemos llegar al punto más alto para conseguir dos cosa: La primera será desbloquear los detalles de la zona a la que pertenece dicha torre, los cuales serían la ubicación de paredes, edificios y misiones. Finalmente, al “conquistar” dicha torre, podremos viajar de una torre a otra, llegando a distintas zonas del mapa en cuestión de segundos.
La calidad sonora es otro aspecto que debe ser resaltado, estando a la par de cualquier superproducción cinematográfica. Las voces van acorde a los personajes y realmente transmite intención. Los orcos y demás adversarios, hablan y hacen los mismos gruñidos tal como lo recuerdas en la trilogía de Peter Jackson. Las armas, los poderes y el ambiente tienen una impecable naturalidad. Los espadazos y golpes son secos, mientras que la magia es atemorizante. En cuanto al ambiente, escuchar al viento mientras caminas por los senderos de Mordor cuando está a punto de caer la noche es toda una delicia.
La banda sonora, por su parte, compuesta por Garry Schyman y Nathan Grigg sólo puede ser descrita igual como la propia odisea: Épica. Las melodías que sonaran a lo largo de nuestro viaje han sido perfectamente implementadas y concebidas. Creando un magnífico concierto de música tenebrosa, con coros emocionantes y de inspiradores matices. Una auténtica joya que tus oídos no pueden perderse escuchar.
A la altura de la grandeza
En cuanto a la jugabilidad, es el aspecto menos original del título, pero que a pesar de ello, destaca gracias a ser un grandísimo ejemplo sobre cómo puedes implementar mecánicas de otros títulos de manera magistral a tu propia obra. En este caso, Shadow of Mordor se siente como el grandioso hijo que tuvieron Assassin`s Creed y la serie Batman: Arkham. El juego de Monolith Productions se parece al de la saga de los Asesinos y Templarios en su fórmula de ir asesinando a ciertos blancos para conseguir un bien mayor, además de que la forma de desbloquear zonas en el juego (Escalando y forjando torres) es evidente su parecido a la de subir las Atalayas para realizar la sincronización. Mientras que a la hora de pasar a la acción, la mecánica no variará de ser “Ataca, contraataca, ataca, evade, ataca, contraataca…” a los enemigos, tal como en el juego de Rocksteady Studios. Además de que en algunos eventos deberemos de ser sigilosos, infiltrándonos en bases enemigas para eliminar a un objetivo de la manera más silenciosa, caso que involucra a los ya comparados dos juegos.
Pero a pesar de la poca originalidad de la forma de controlar al personaje, hacerlo es preciso, conocido y sencillo. Un total acierto por parte de los desarrolladores norteamericanos, pues han sido inteligentes en saber qué copiar perfectamente y qué implementar para hacer que Middle-Earth: Shadow of Mordor se sienta como una experiencia completamente novedosa y atractiva para todo aquel que le ponga las manos encima.
Middle-Earth: Shadow of Mordor, desde su anuncio, fue pasado con cierta discreción cosechando premios y reconocimientos a donde ha llegado a presentarse (Logró 45 galardones en el pasado E3) pero que sin duda, tras su lanzamiento, dará mucho de qué hablar pues es ya uno de los mejores videojuegos que nos ha dejado éste 2014 que está a unos meses de terminar. La obra de Monolith Productions es un titulo altamente recomendable, que dará un sinfín de horas de diversión y satisfacción para todo aquél que lo pruebe, con una historia envolvente, una producción soberbia y la promesa de que el mundo de Tolkien de The Lord of the Rings está en las manos adecuadas. La Tierra Media te espera…