Revolucionar la industria de los videojuegos no es una tarea sencilla, y aun así, Super Mario Bros. lo ha hecho en por lo menos dos ocasiones. Desde hace 30 años la obra de Shigeru Miyamoto ha establecido estándares en el desarrollo de videojuegos, ha inspirado cientos de proyectos más y ha quedado plasmada en el corazón de los jugadores en todo el mundo. Ahora, somos todos aquellos a los que Mario y compañía han brindado un poco de alegría los que debemos encargarnos de la serie más importante de la industria; Super Mario Maker, no solamente nos pone en el papel que ha desempeñado por años la compañía japonesa, sino que además nos permite seguir disfrutando como en las últimas tres décadas las aventuras del plomero más famoso del mundo.
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El Miyamoto que llevamos dentro
La idea general de Super Mario Maker toma tres conceptos principales para dar sentido a toda la estructura del juego: crea, juega y comparte; desde que nos encontramos en el menú principal tenemos la opción de pasar a la parte creativa o directo a los niveles desarrollados por Nintendo u otros usuarios. Podría decir que Mario Maker resulta como una apuesta que se divide entre los que desean realizar cosas nuevas y los que solo quieren pasar directo a la acción. Sin embargo, mi experiencia con el juego me ha dejado claro que es toda una dinámica de aprendizaje lo que hay detrás del título.
Vayamos directamente con el plato fuerte. Super Mario Maker es básicamente un creador de niveles en donde podemos poner a prueba todo lo que hemos aprendido a lo largo de 30 años con el plomero. Al igual que el resto de los juegos de la serie, Mario Maker se basa al 100% en el control en turno para ofrecer una mejor experiencia, dejando el otro aspecto emblemático de Nintendo en las manos del jugador; o sea, la creación de niveles. Si has prestado atención a todo lo que ha habido detrás del lanzamiento del juego te darás una mejor idea de lo que podrás encontrar en el título.
Super Mario Maker es quizá la herramienta más intuitiva que tenemos en consolas para desarrollar una experiencia propia. Si Minecraft, Little Big Planet o Disney Infinity, te parecieron sencillos, Mario Maker te será una experiencia completamente envolvente para el desarrollo creativo, no solo por los elementos clásicos que todos conocemos, sino por la forma en que están presentados y pueden ser controlados en Wii U. Después de 3 años en el mercado la Gamepad ha encontrado un uso que sobrepasa todo lo que en algún momento pudimos pensar que podría hacer el hardware de Wii U.
La pantalla del Gamepad servirá como un cuaderno donde plasmamos todas nuestras ideas y el stylus será nuestro lápiz para incorporar cada elemento que deseemos. Explicarlo incluso podría sonar más difícil de los que es en realidad. Super Mario Maker es como el Paint de Windows… bueno en realidad es como Mario Paint pero la referencia es más fácil con el programa de Microsoft. En la pantalla verás un escenario de Super Mario Bros. vacío por lo que nosotros deberemos de complementarlo con nuestras ideas y todo lo que necesitemos estará colocado en la parte de arriba de la pantalla; desde los elementos para crear el escenario como los tubos o ladrillos, hasta los enemigos como los goombas y koopas, todos estarán disponibles para empezar a armar nuestro nivel.
Probablemente lo anterior ya lo podías haber visto en algunos editores de Super Mario Bros. en PC, pero en Super Mario Maker no es la idea de crear niveles lo sobresaliente, sino la forma de hacerlo. El Gamepad se convierte en un lienzo y el stylus en nuestro pincel, y con solo elegir un elemento, arrastrarlo por la pantalla o colocarlo en un lugar determinado, habremos iniciado el proceso creativo. Tardaremos más en imaginarnos algo para el juego que en plasmarlo dentro del Wii U. Mario Maker es la combinación perfecta de crear y jugar, pues en cualquier momento puedes iniciar el nivel que estás haciendo y ver tus avances, con ello elegirás nuevos retos, mayores obstáculos e incluso podrías frenar tu ferocidad y dar más oportunidad a los otros jugadores facilitandoles las cosas.
Cada icono que ves en la pantalla del Gamepad, mientras estás creando, tiene una razón de estar ahí y vuelve aún más fácil el desarrollo creativo. Un botón para dejar en blanco la pantalla, uno para deshacer una acción e incluso comandos de cortar y pegar, pasan al juego a un nivel más cercano a lo que tenemos actualmente en una computadora, por eso la analogía con Paint. Con los personajes «vivos» pasa lo mismo, dale un hongo rojo a un koopa y crecerá, ponle alas y volará, coloca trampas en los ladrillos de secreto o haz que una planta piraña lance fuego y vuele. Hacer cambios en los parámetros establecidos es tan fácil como agitar al personaje con el stylus y pasará a una nueva forma, seleccionar un elemento y borrarlo o cambiarlo de lugar o hacer que un lakitu lance koopas rojos, no hay límites.
En general las posibilidades de Super Mario Maker son infinitas y podrías pasar de los clásicos niveles del primer Super Mario Bros. a experimentar escenarios que tengan más relación con Metroid o The Legend of Zelda, por la estructura que su creador decidió brindarles. Todo lo anterior es pensando solamente en elementos y características del Super Mario Bros. original, pero Super Mario Maker incluye además otros tres juegos emblemáticos del plomero: Super Mario Bros. 3, Super Mario World y New Super Mario Bros. U. En total podrás crear niveles de cualquiera de los cuatro juegos incluidos, cambiando entre escenarios abiertos, como los del clásico primer nivel, a mundos acuáticos, bajo la tierra, en el cielo o en los interiores del castillo e incluso dando cambios de juego en juego para ver en que título va mejor tu creación. Cada aspecto de juego incluye elementos únicos como el traje de Tanooki al hacer uso de Super Mario Bros. 3 o el Champicóptero en New Super Mario Bros. U, por lo que debes tener en cuenta que sí requieres de un power up especial para tu nivel y ese item está asociado a un juego específico el cambio podría dejar inservible el nivel o volverlo más complicado.
Si bien el juego ya tiene una enorme cantidad de elementos incluidos aún puedes expandir el universo de Super Mario Bros. haciendo uso de los amiibos. Sí, las figuras que tanto trabajo y dinero nos cuestan ahora tienen un buen uso. Colocar la figura en el Gamepad nos permitirá disfrazar a Mario con el skin de la figura correspondiente en su versión de 8bits, lo que hace infinitamente mejor pasar escenarios inspirados en Zelda, Pokémon o hasta Splatoon. Lamentablemente esta opción solo es válida en Super Mario Bros., por lo que el power up cambiará si elegimos desarrollar o jugar el nivel en una versión diferente. Ya que tocamos un poco las cosas que no terminan por convencer me gustaría mencionar la nula interacción entre juegos. No podemos pasar de un tubo de Super Mario World a Super Mario Bros. 3 o New Super Mario Bros. U, todo se limita a un solo juego.
Ya hablamos mucho de la parte creativa, ahora es parte de adentrarnos en la idea de «jugar». Si bien Super Mario Maker incluye niveles desarrollados por Nintendo, estos son prácticamente tutoriales para aprender a crear, no es malo pero hubiéramos preferido ver niveles clásicos de los cuatro juegos que forman parte de Mario Maker o incluso ver los 4 juegos completos en el título. Sin embargo, la idea de crear ha gustado mucho a los seguidores de Super Mario por lo que hay una enorme cantidad de niveles listos para ser jugados.
Quizá el modo más interesante de Super Mario Maker es «Desafió 100 Marios», este consiste en pasar 8 niveles elegidos al azar por el juego de todas las creaciones que hay en la red y solo contamos con 100 vidas para lograrlo. La suerte nos dirá si nos enfrentamos a niveles de principiantes o a creaciones que parecen ser extraídas de la mente de Miyamoto. Como punto a nuestro favor tenemos la opción de elegir la dificultad de los niveles que la máquina elegirá. Este es el único modo de juego junto al «Desafió 10 Marios», en ambos la Princesa Peach es secuestrada y debemos buscarla, el primero, como ya mencionamos, en niveles creados por otros jugadores y el segundo en niveles de tutorial.
Pasemos rápidamente a la parte de «comparte». Una vez que tengamos nuestro nivel creado con todos los elementos que hayamos elegido podemos subir el nivel a Internet y compartirlo con todo el mundo… siempre y cuando podamos pasarlo. En Super Mario Maker no hay niveles imposibles, si el creador no lo puede superar no lo puede compartir, este punto es beneficioso para tener un control de calidad mayor sobre lo que el jugador puede jugar y encontrar en línea. Pero deja fuera muchas ideas que podrían llegar a ser buenas y que no están pulidas al 100% o como en mi caso que no pude terminar mi nivel pero por falta de habilidad y no porque fuera hecho de manera que no se pudiera pasar. Simplemente una opción de «Niveles imposibles» podría albergar esas obras y posteriormente los mismos jugadores podrían determinar si es imposible o no, además de que sería un nivel de diversión mucho más alto.
En fin, una vez que has superado tu nivel lo podrás subir al juego y estará disponible para todo el mundo… siempre y cuando tengan el código de tu nivel, algo así como el Friend Code de DS y 3DS. Estamos en 2015 y Nintendo sigue queriendo proteger a todo el mundo. Por suerte hay dos opciones para adentrarte a las creaciones de otros: «Explorar Niveles» y «Explorar Creadores», estas permiten visualizar los niveles que mayor recibimiento han tenido de la comunidad de jugadores, según el número de estrellas que han recibido; lamentablemente no podemos hacer búsquedas específicas, por lo menos podemos modificar los parámetros de la búsqueda para la dificultad, la región y el periodo en que fueron subidos los niveles.
Volviendo al apartado de «jugar», una vez que entras a un nivel puedes ver los comentarios que los otros jugadores han dejado por medio de Miiverse. Sí el nivel es difícil podrás tener algunas pistas o ser engañado para caer en una trampa. Las creaciones que he tenido la oportunidad de probar presentan un buen reto o un gran paseo, pues algunas solamente requieren que des un paso y disfrutes de una intrincada montaña rusa, mientras que los primeros a veces son más fáciles de lo que parecen o terminan por hacerte cuestionar si alguien ha roto el juego y ha subido un nivel imposible.
Antes de dejar el apartado de gameplay hay que mencionar algunos aspectos negativos. Super Mario Maker deja atrás el multijugador de la serie New Super Mario Bros. e incluso Super Mario 3D World, hubiese sido increíble jugar a los juegos clásicos con otros tres amigos. En el aspecto creativo tenemos ciertas restricciones pues al inicio los contenidos se desbloquean a lo largo de 9 días, y a pesar de que eso se «arreglo» con una actualización, yo tuve que cambiar la fecha de la consola para acceder más rápido a lo que quería poner en mis niveles. La falta de modos de juego también resulta un tanto negativa pues todo se concentra en el online, y por último la nula posibilidad de cruzar mundos e incluso armar «juegos» completos, crear un nivel está bien pero se pudo explotar mucho más la mecánica.
It’s Me Mario
Entrar a los aspectos técnicos de Super Mario Maker es algo bastante rápido. A pesar de que casi todo el juego se ve en en 8 o 16 bits, la recreación de Super Mario Bros., Super Mario Bros. 3 y Super Mario World, es increíble. La definición y la paleta de colores son fantásticas e incluso hacen que New Super Mario Bros. U se vea extraño y hasta viejo. Básicamente tenemos los títulos clásicos con la nueva música de Koji Kondo o las melodías de antes, todo en gloriosa alta definición. Incluso si queremos entrar en detalles bastaría con mencionar el homenaje a Mario Paint en la pantalla de inicio o la bienvenida que nos da el juego cada vez que lo iniciamos, los minijuegos, lo rápido que se sube o descarga un nivel, todo tiene una ejecución excelsa.
Y si de detalles hablamos bastaría con mencionar el libro que acompaña a cada copia del juego, una guía visual por todo lo que podemos crear en Super Mario Maker que además sirve en conjunto con el instructivo digital del juego y nos ayuda a liberar vídeos explicativos sobre la manera en que funcionan los objetos que podemos utilizar y cómo podrían ayudarnos en la creación de nuestro nivel. Eso sin mencionar lo bonito y bien ilustrado que está el libro.
Definitivamente los juegos de «hágalo usted mismo» han sido una constante interesante dentro de la industria en los últimos años. Sin embargo, y aunque suene ilógico, la mayoría de ellos se basan en conceptos que buscan la realización de experiencias nuevas en la escena de los videojuegos…aunque terminen por convertirse en réplicas de otros juegos. Super Mario Maker es precisamente lo contrario pero bajo el concepto de creación y aprovechando todo lo que sus desarrolladores ya han comprobado por 30 años.
El trigésimo aniversario de Super Mario Bros. no solo ha sido una experiencia como las que ya conocemos de Nintendo, en esta ocasión la compañía nos deja ser partícipes en su pilar más fuerte: la creación de niveles. Herramientas probadas por mentes como la de Shigeru Miyamoto o Takashi Tezuka, pocas veces las tendremos tan de cerca como con Super Mario Maker. No me imagino como será adentrarse al juego con aspiraciones a diseñador o programador, teniendo en mente que estamos ante conceptos que revolucionaron una industria. Super Mario Maker es mucho más que un juego y la manera en que lo aprovechemos será el mejor festejo que le podamos dar a la serie.
Les comparto el único nivel que he podido acabar para compartir; ando en proceso de hacer algunos más pero debo poder completarlos primero:
Super Mario Bros.: 38AB-0000-0040-1007.
No olviden compartirnos sus niveles.