Reseña – The Dark Pictures Anthology: House of Ashes

Supermassive Games sigue con su tarea de entregarnos experiencias interactivas que nos llenen de terror y nos lleven a mundos de pesadilla. En su nueva The Dark Pictures Anthology todo comenzó de manera aceptable con sus 2 primeras entregas Little Hope y Man of Medan donde los fantasmas y brujas se apoderaron de nuestras sueños para mostrarnos el difícil camino de la supervivencia.

Ahora por fin llega la tercera entrega de esta antología, House of Ashes, para contarnos una nueva historia muy alejada de lo visto hasta ahora, enfrentándonos a feroces monstruos y la lucha interna entre el amor y los estragos de una guerra que no tiene mucho sentido. Haciendo su presentación unos días antes de Halloween y acompañados de leal curador, el encargado de contar estas historias, nos adentramos en una experiencia que seguro te hará pasar un buen rato solo o acompañado.

La Guerra

House of Ashes nos lleva a un caluroso Iraq en el 2003, justo después de la captura de la capital por parte del ejército estadounidense, con la misión de desmantelar las armas nucleares y químicas con las que supuestamente cuenta el ejercito local en una ubicación remota. En esta búsqueda conocemos al escuadrón que lidera la misión, tres marines sumamente fieles (Jason, Nick y Rachel) un incómodo integrante de la CIA (Eric) y un soldado del ejército iraquí (Salim). Como ves toda una planilla para saber que nos encontramos con una experiencia que estará cargada de acción, explosiones y muchas armas.

Pensando que la información que mostraba la locación del armamento es un error, los protagonistas terminan cayendo en las ruinas de un templo antiguo mesopotámico. Éste se convierte rápidamente en su peor pesadilla, pues el equipo encuentra vestigios de la civilización que ahí vivió e información de un grupo de exploradores que no pudo escapar de las criaturas sedientas de sangre que por años han acechado el lugar. A partir de este punto, los participantes de esta historia tendrán que decidir entre colaborar, dejando a un lado sus creencias, o continuar como un equipo e intentar no morir en el camino.

Como sabemos de esta antología, Supermassive Games trae una estrella del cine a su universo con cada entrega: anteriormente vimos a Rami Malek y Will Pouter, y ahora tocó el turno a la actriz Ashley Tisdale, a quien tal vez recuerdes de High School Musical o Zack y Cody: Gemelos en Acción. Es cierto que a Tisdale la recordamos por papeles menos cargados de acción en la pantalla grande, pero le sienta a este título bien al ser una cara conocida, y seguro pronto te encantará el papel que encarna.

El multiverso se desató

Para House of Ashes, la desarrolladora mantuvo un sistema de juego idéntico a las anteriores, con muchos quick time events en los que tenemos que presionar algún botón hasta llenar su barra, presionarlo una vez antes de que se acabe el tiempo o apuntar y accionar alguna arma, en la mayoría con pocos segundos para llevarlo a cabo. Como en los juegos anteriores, en la mayoría de estos eventos se nos indica con algún símbolo para que estemos atentos y que tipo de mecánica está a punto de ocurrir. No obstante, hay que tomar cuenta que esto no ocurre siempre, por lo que siempre debes tener el control cerca de las manos para reaccionar. De no ser así podemos llevarnos una sorpresa y perder algún integrante del equipo más rápido de lo esperado.

Una forma en la que el equipo nos hace entender mejor la historia de House of Ashes es a través de los coleccionables, que están regados en todas partes. Éstos los encontramos en los momentos en lo que tenemos el control del jugador y brillan dentro de nuestra vista: en su mayoría son cartas o libros que podemos manipular con interacciones del joystick y casi todos tienen algún secreto que, al ser descubierto, nos ayudan a encontrar puntos clave y cómo poder enfrentar al enemigo. Además, tenemos las premoniciones, visiones de posibles futuros que obtenemos a través de tallados de piedra que nos preparan para siguientes escenas. Por último, hay un añadido que nos invita a ser curiosos: se trata de un diario en video que se activa cada vez que encontramos una nota de los visitantes anteriores que nos explica un poco más sobre a qué nos estamos enfrentado y sobre cómo ellos vivieron este infierno.

Causa y efecto

Las experiencias interactivas que nos presenta la The Dark Pictures Anthology, necesitan estar cargadas completamente de narrativa para incentivarnos a seguir jugando algo que en su mayoría es, observar y entender. Para esta entrega, Supermassive logró traernos una historia entretenida, con mucho lore y personajes que comprenderemos y veremos crecer a lo largo de 5 horas de juego aproximado (al menos en la primera vuelta). Por supuesto, ahondaremos en las motivaciones de cada uno de estos personajes, descubriremos sus luchas personales y esto nos proporcionará las bases para tomar decisiones que se sentirían más complejas si no tuviéramos trasfondo.

Cabe destacar que estos puntos van más allá de solo una partida, pues claramente House of Ashes te insiste en buscar todas las posibles variaciones y descubrir las diferentes versiones de este universo… y por fin liberar el multiverso. Seguramente, durante la primera partida logremos sobrevivir con los 2 personajes que nosotros nos encariñamos más, y en una segunda o tercera podremos descubrir que pasa si el equipo completo evita la muerte.

¡¡¡¡La obscuridad!!!!

Como lo mencioné al principio, esta entrega cambia la temática completa de los enemigos, pues modifica el miedo que nos puede causar algo intangible como un fantasma en un navío o un aquelarre de brujas en un pueblo siniestro, por criaturas de la noche que nos acechan. Y sinceramente creo que parte de lo que engloba muy bien a esta experiencia es el saber que estos enemigos tienen debilidades al ser de carne y hueso, y que podemos hacerles daño de alguna manera. Pero no todo en esto es bueno, ya que el mismo punto genera que el terror que pudimos sentir en las experiencias anteriores disminuya considerablemente. Las locaciones dentro del templo perdido en su mayoría están iluminadas, ya que casi todo el juego se desarrolla en el día, pudiendo recibir algunos rayos en los cuartos, desairando el factor sorpresa. Además, también está la falta de algunos jump scare que pudieran funcionar muy bien para contrarrestar esto.

En cuanto a exploración, House of Ashes se recorre de manera muy similar a Little Hope, con espacios semi abiertos donde tenemos el control del personaje y debemos encontrar las pistas; aunque en su mayoría siguen siendo pasadizos en túnel donde únicamente hay que seguir el camino y esperar la siguiente escena.

Esta entrega cuenta con 3 modos de juego, solitario, online o multijugador local. La experiencia principal es el juego en solitario, pero claro que el juego online con un amigo dota a la experiencia de una mayor sensación de tensión. Este modo se centra en presentar lo mismo que vemos en el juego en solitario, con la diferencia de saber que las decisiones no son solo nuestras y no queda más que confiar plenamente en las de nuestro compañero. También está el modo local para hasta 4 jugadores que tiene su encanto, pues se puede llegar a pensar como una noche de película de terror. En este último modo tenemos que turnar el control y dejar que cada jugador tome la decisión que más le parezca y conocer el desenlace del juego con las decisiones de todos los participantes.

Luces, sombras y muecas

House of Ashes corre de manera excepcional y ocupa todas las capacidades para la actual generación de consolas y hardware de PC. Podemos escoger entre modo rendimiento o calidad, y al ser un juego donde pocas veces tenemos el control es preferible mantener el rendimiento para apreciar las escenas de la manera más fluida. Además, el título cuenta con una banda sonora de muy buena calidad y sonido ambiente que te llevara hasta la locación desértica, ya sea con los altavoces de la TV o, mejor aún, con audífonos que aumentan la inmersión.

Aunque pareciera que todo lo que vemos aquí es oro, no es así completamente. Y es que al igual que las anteriores entregas de The Dark Pictures Anthology, House of Ashes tiene problemas en la gesticulación de los personajes principales en las caras de asombro terror o sorpresa pueden llegar a verse bastante mal. Estoy seguro que este uno de los puntos que Supermassiva Games busca atacar y probablemente con algunas entregas más podamos ver la mejoría.

Sin duda, con cada entrega nueva The Dark Pictures Anthology se ha logrado superar y me atrevo a decir que House of Ashes se siente como la más pulida de las tres hasta el momento. Con más camino aún por recorrer, estoy seguro de que Supermassive puede crear una antología de culto para estas experiencias que me encantará seguir probando.