Uno de los juegos más controversiales de la generación pasada, The Last of Us Part II, regresa en su versión definitiva, una vez más en PC. Pero, ¿podrán Nixxes y Naughty Dog redimirse del terrible trabajo que fue el port de la primera versión?

Un controversial final a la franquicia

Desde su debut en 2013, The Last of Us se ha convertido en uno de los pilares narrativos de la industria, una obra que elevó el estándar de lo que un videojuego puede lograr en términos de dirección, escritura y actuación. En su momento, fue considerado el pináculo del medio. Por eso, cuando se anunció su secuela, los fans esperaban con ansias continuar la historia que tantos había cautivado.

Con su lanzamiento en 2020, Naughty Dog no solo retomó la historia de Joel y Ellie, sino que se atrevió a desafiar las expectativas del público con una propuesta emocionalmente ambiciosa, controversial y —a pesar de todo— técnicamente sobresaliente. Fue un momento decisivo para la carrera de Neil Druckmann y, aunque no todos los fans quedaron satisfechos, el juego demostró que la historia y el arte pueden triunfar.

Hoy en día, The Last of Us Part II no solo es considerado uno de los juegos más impresionantes de su generación, sino también una obra que cimentó lo que muchos ven como la historia más compleja, completa e interesante jamás contada en un videojuego. La industria lo ha reconocido con múltiples ports y remasterizaciones de la primera parte, además de una adaptación en HBO que ha sido aclamada por la crítica.

Para muchos, The Last of Us Part II sigue siendo una experiencia divisiva: su historia toma riesgos enormes y su ritmo pausado puede resultar extenuante para quienes esperaban una aventura más convencional. Sin embargo, es innegable que se trata de un videojuego que empuja los límites del medio, tanto en lo narrativo como en lo técnico.

Nixxes al rescate de los jugadores de PC

Ahora, cuatro años después, The Last of Us Part II llega por primera vez a PC gracias al trabajo de Nixxes Software. Lo hace en una versión remasterizada que no solo busca replicar la experiencia de PlayStation 5, sino también enriquecerla con las bondades de la plataforma, ofreciendo la versión definitiva de esta historia.

Quizás para muchos no sea claro por qué es importante que Nixxes esté a cargo de este proyecto. Lamentablemente, el port de The Last of Us Part I es considerado uno de los mayores fracasos de Naughty Dog e Iron Galaxy, a pesar del prestigio de ambos estudios, que han entregado increíbles adaptaciones a otras plataformas—Skyrim y Doom en Nintendo Switch son prueba de ello.

Sin embargo, el tumultuoso proceso de desarrollo de The Last of Us Part I complicó las cosas. El cambio entre el desarrollo interno de Naughty Dog e Iron Galaxy afectó la escalabilidad del juego, lo que resultó en graves problemas de rendimiento. Incluso hoy, el título sigue presentando fallos de CPU, afectando el desempeño incluso en computadoras de alta gama.

Por otro lado, Nixxes tiene una larga trayectoria de excelentes ports para PC. Con títulos como Spider-Man: Miles Morales, Ratchet & Clank: Rift Apart y Ghost of Tsushima, han demostrado un compromiso constante con la plataforma. Su participación en este proyecto es clave para evitar los errores del pasado y asegurar una experiencia óptima para los jugadores de PC.

Una experiencia impresionante en todo tipo de hardware

Desde el primer minuto, esta edición remasterizada en PC demuestra que Nixxes sabe exactamente cómo presentar una obra con respeto y ambición técnica.

En términos visuales, el juego luce simplemente impresionante. La posibilidad de jugar en resolución 4K nativa, con tasa de refresco desbloqueada y soporte completo para tecnologías como NVIDIA DLSS 3, AMD FSR 3.1 y XeSS permite que la experiencia visual se adapte a una amplia gama de configuraciones.

En nuestras pruebas principales, con una RTX 5090, el juego se mantuvo estable a 4K y 120 cuadros por segundo sin ningún tropiezo, incluso con Ray-Tracing activado y configuraciones al máximo.

Más allá del rendimiento bruto que el juego ofrece, lo que verdaderamente impresiona es su flexibilidad. Los menús de configuración presentan un nivel de detalle pocas veces visto en ports recientes. Es posible ajustar desde la calidad del follaje hasta la distancia de renderizado de objetos, pasando por filtros de posprocesado, calidad de sombras y reflejos. No hay configuración demasiado pequeña, y todo está presentado con claridad, incluyendo herramientas de previsualización que explican cómo cada cambio afectará el rendimiento.

Esta es una de esas versiones que no solo se siente como un port, sino como una experiencia diseñada específicamente para el usuario de PC.

Cabe recalcar que, incluso en hardware más modesto como el Steam Deck, los resultados son notables. El juego corre a 30 FPS estables con resolución dinámica, ofreciendo una experiencia portátil completamente funcional. Con algunos ajustes, como reducir sombras y reflejos, es posible alcanzar entre 40 y 45 cuadros por segundo, manteniendo una calidad visual aceptable.

Por su parte, el ROG Ally logra entre 50 y 55 FPS constantes con los ajustes adecuados. Además, con la generación de cuadros activada, la experiencia puede llegar hasta los 80 FPS, todo a 1080p con escalado dinámico.

Esto no solo demuestra el excelente trabajo de optimización, sino también el compromiso de Nixxes con ofrecer una experiencia inclusiva, escalable y refinada.

Un lanzamiento lleno de contenido y opciones de última tecnología

Algo único de esta versión, además de los cambios visuales, son los agregados para el control de mouse y teclado, que ofrecen muchas opciones de configuración para aquellos que deseen usar cualquier tipo de mando.

También incluye soporte completo para pantallas ultrawide en PCs que lo requieran. Además, al igual que en la versión de PS5, The Last of Us Part II Remastered incluye el contenido No Return, un modo roguelike donde nos enfrentamos a hordas de zombis, con el objetivo de sobrevivir el mayor tiempo posible. Este modo nos da la opción de jugar con múltiples personajes de la historia.

Asimismo, se incluye todo el contenido del documental sobre la creación del juego, así como el modo de guitarra libre que fue añadido con el lanzamiento de PS5. En este modo, con suficiente creatividad, seguro podrás interpretar las canciones más icónicas de las tardeadas de tu preparatoria o secundaria.

El buen lamento boliviano cortesía de VIDEOGAMES POWER

Otro punto a destacar es el soporte para tecnologías avanzadas. El HDR brilla con particular intensidad en esta versión, ofreciendo negros profundos y una gama de colores que resalta la dirección artística del juego. El Ray-Tracing, aunque sutil, contribuye a la ambientación con reflejos más naturales y una iluminación general más creíble.

El soporte para el DualSense es completo cuando se conecta por cable, incluyendo respuesta háptica y gatillos adaptativos, lo que añade una capa extra de inmersión. De forma transparente, se aclara que estas funciones no estarán disponibles vía Bluetooth, algo que se agradece desde el punto de vista comunicativo.

En cuanto a problemas técnicos, durante el primer día se detectaron algunos artefactos visuales menores en la versión con RTX 5090. Sin embargo, tras una rápida actualización del equipo de desarrollo, estos desaparecieron por completo. Desde entonces, el rendimiento ha sido estable y la experiencia, libre de errores. Esto refuerza el perfil de Nixxes como uno de los mejores estudios especializados en ports para PC dentro del ecosistema de PlayStation.

Quizá el único punto en el que esta versión remasterizada puede resultar polémica es en su tratamiento de la imagen. Algunos usuarios podrían notar una ligera sobresaturación en la nitidez, especialmente en entornos exteriores muy iluminados. Sin embargo, esto puede ajustarse desde los parámetros visuales. A pesar de ello, en algunos casos no parece hacer mucha diferencia, pues parece ser una decisión artística que, en su momento, en 1080p en PS4, creaba atmósfera visual. En esta versión, sin embargo, da la sensación de que el juego está corriendo en una resolución menor a la seleccionada.

Una historia que hará sufrir y llorar hasta los gamers más rudos

La historia se mantiene intacta: una cruda meditación sobre la violencia, la pérdida y el ciclo interminable de la venganza. El guion de Neil Druckmann y Halley Gross brilla por su madurez emocional, mostrando su capacidad de retratar personajes complejos cuyas decisiones nunca son fáciles de juzgar.

El ritmo es denso y deliberado, una elección que puede alienar a algunos jugadores, pero que recompensa a quienes se dejan llevar por la intensidad de la narrativa. La inclusión de la historia de Abby como contrapunto a la perspectiva de Ellie sigue siendo uno de los actos más audaces que hemos visto en un AAA reciente, y verlo desplegarse en todo su esplendor gráfico es una experiencia que adquiere nuevas dimensiones en esta versión.

Durante su campaña de alrededor de 30 horas, The Last of Us Part II Remastered presenta momentos intensos, impresionantemente cinematográficos, divertidos, genuinamente hermosos, pero sobre todo muy duros. En muchos momentos, durante mi tiempo con el juego, fue difícil continuar, pues el tono de la historia es bastante complejo. Sin embargo, para aquellos que lo terminen, se encontrarán con una historia compleja y preciosa, llena de catarsis, sufrimiento, dolor y crecimiento.

En esta ocasión, este nuevo port para PC representa la oportunidad perfecta para sumergirse en su mundo con una fidelidad gráfica nunca antes vista, sin los compromisos que solían imponer las limitaciones de hardware en consolas.

Otro increíble port digno de celebrarse

La llegada de The Last of Us Part II a PC marca otro momento significativo para la estrategia de PlayStation como publisher multiplataforma. Con ports de altísima calidad como God of War, Horizon Forbidden West y ahora esta obra maestra narrativa, la compañía reafirma su compromiso con una nueva audiencia, sin comprometer la identidad de sus franquicias.

En este sentido, The Last of Us Part II Remastered no solo es uno de los mejores ports que hemos visto en años, sino también un recordatorio poderoso de por qué esta serie ha dejado una huella imborrable en el medio.

Para quienes nunca jugaron esta entrega en PlayStation, esta versión representa la forma definitiva de experimentarla. Para quienes ya la conocían, es la oportunidad perfecta para revivirla con una fidelidad técnica que recontextualiza muchos de sus momentos más impactantes. Nixxes y Naughty Dog han cumplido su promesa: llevar una de las experiencias más importantes de la última década al terreno más versátil y exigente del gaming moderno, y hacerlo con excelencia.

The Last of Us Part II no es un juego fácil, ni en su historia ni en su jugabilidad. Pero ahora, al menos, puedes vivirlo en la forma más configurable, fluida y visualmente impactante disponible hasta la fecha.

Pros:

+ Una excelente muestra de lo que PC gaming puede lograr, con increíbles visuales y un despliegue impresionante de tecnología.

+ La mejor forma de jugar esta historia, con Raytracing, HDR y tasa de alto refresco, justo en el momento indicado antes de la segunda temporada del show de HBO.

+ El gameplay preciso y divertido que tanto nos gustó desde su lanzamiento original, ahora se expande con soporte de teclado y más configuraciones.

Contras:

Pequeños problemas visuales que se presentaron; el juego te menciona que actualizar tus drivers a la última versión puede ayudar, pero no siempre será tan fácil.

La misma historia compleja y divisiva, con poco contenido nuevo o expandido que pueda ayudarnos a aceptarla de mejor manera. Si no te gustó en su momento, poco ha cambiado.