En lo que a sus últimos videojuegos respecta, Ubisoft no ha sido el mejor anfitrión al presentarlos, es por esto que la compañía adoptó una nueva estrategia en la que pretenden mostrar el contenido una vez que se encuentre disponible en las plataformas jugables. Esta estrategia les ahorrará decepciones y quejas a los usuarios que, como casi siempre sucede, esperan una cosa y reciben otra. El caso más destacado en el que Ubisoft se vio involucrado pertenece a Watch Dogs, donde el antes y el después de su comercialización dejó ver un cambio totalmente radical.

 

Ante esto, el CEO de Ubisoft, Yves Guillemot, comenta lo siguiente:

 

En el E3 2015 dijimos, ‘vale, vamos asegurarnos que todo lo mostrado sea jugable y mostrado en las plataformas objetivo’. Cuando mostramos algo preguntamos al equipo si es jugable y si están seguros que los usuarios podrán entender exactamente lo que es. Es lo que aprendimos de la experiencia Watch Dogs: si no se juega en la plataforma objetivo, entonces es un riesgo.

 

Así pues, el directivo admite que la creación de juegos como Watch Dogs es un auténtico desafío y es que cuando salen, sobre todo en el caso de las primeras entregas de la franquicia, no son perfectas en todo. Pensamos que lanzamos un juego de buena calidad como primer paso de una nueva marca con una nueva tecnología. Es muy complejo (hablamos de multijugador, conectividad con móviles y tabletas, etc.) y puede que fuese demasiado para el comienzo. 

 

Ubisoft ha aprendido lecciones importantes incluso con juegos como Assassin’s Creed, esperemos que con esto la firma logre reivindicarse y recupere la confianza de los usuarios.