El mercado japonés se presentó como uno de los retos más grandes de Microsoft en su transición next-gen con la Xbox One; desde un principio, durante el lanzamiento de la consola en tierras niponas, las cosas no pintaron tan bien como deseaban, sin embargo tras más de medio año en el mercado japo, la compañía alcanzó un total de 50.009 consolas vendidas.
A pesar de que no les está yendo ni exageradamente bien, ni exageradamente mal, esta cifra no es lo suficientemente potente para competir con las de PlayStation 4 que ha alcanzado cerca de 1.375.839 de unidades, y mucho menos tocan o tan siquiera se acerca a las cifras de Wii U las cuales llegan a los 2.269.615 de consolas vendidas; no cabe duda de que Nintendo está en su tierra.