Para cerrar su conferencia de E3, el principal responsable de la marca Xbox, Phil Spencer develó al mundo la nueva integrante de la familia Xbox o al menos el desarrollo que buscan integrar a su línea de consolas: Project Scorpio. La mencionada máquina fue presentada no como un sustituto de Xbox One o Xbox One S, sino como una opción más dentro de esta gama y compatible con todos los juegos de dichas plataformas… o al menos eso creíamos.
En una entrevista realizada a Shannon Loftis, directiva de publicación de juegos en Xbox, mencionó la posibilidad de que algunos desarrolladores quieran usar el nuevo potencial de Scorpio para proyectos más ambiciosos que en una Xbox One normal:
Es posible que algunos desarrolladores quieran implementar la gama alta en 4K y espero que realmente lo hagan. Pero todos los juegos actuales serán compatibles con Scorpio, no sería una innovación si no tuviéramos ese compromiso.
Justamente lo que menciona la directiva es el principal «problema» de Scorpio, pues la plataforma se ha revelado con la posibilidad de aceptar todo lo que exista antes de su lanzamiento, pero nunca se negó la posibilidad de crear nuevas experiencias en pro de sus capacidades. Por definición, Microsoft no desarrollaría una nueva plataforma para tener los mismo juegos que en dos consolas existentes.
Por ahora, la postura oficial de Xbox nos lleva a entender que estaríamos ante la tercera versión de un Xbox One, mientras que entre líneas todos podríamos entender que inaugurarían la novena generación de consolas con dicha máquina.
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